Ahora sí que sí. No hay otro duelo que valga que el Real Madrid - Panathinaikos. Después de muchos pronósticos, especulaciones, ausencias o jugadores destacados, finalmente llegó la hora. El Wizink Center se vistió de gala para la ocasión. El primer partido de los cuartos de final de Euroliga. La diferencia con respecto al año pasado es que esta vez el Real Madrid tiene el factor cancha a favor.
La ausencia de Sergio Llull estaba más que asumida, pero la incertidumbre de cómo evitar que Campazzo no se cargase de demasiados minutos todavía no estaba resuelta. Además de Prepelic, Causeur, Rudy o incluso Ayón, se postulaban como posibles socios del argentino en la posición de base. Parar a Calathes era ya otro dilema. Las incógnitas, para ser resueltas, debían esperar a que el árbitro lanzase el balón y comenzase la primera batalla de la guerra. Con un invitado especial, Luka Doncic, que acudió para animar a los suyos.
Taylor arrancó la moto
El nerviosismo quizás provocó que hasta el minuto tres la lata no se abriese. Taylor fue el encargado de proceder con un triple desde la esquina. El alero del Real Madrid arrancó enchufado el partido, pues en la jugada siguiente, tras una jugada magistral de Campazzo, transformó otro lanzamiento para poner el 6-0. Thomas anotó los primeros puntos para el cuadro griego. Tras un mate, de nuevo de Taylor, llegó el primer tiempo muerto del partido con 8-4 en el luminoso.
El acierto fue escaso por parte de ambos equipos y las defensas colosales. El único al que no se le podía achacar el primer término es a Jeff Taylor, que de nuevo se sacó un triple de la chistera. Acto seguido, le acompañaron Lekavicius y Rudy. Después de una serie de tiros libres por parte de ambos equipos, el primer cuarto finalizó con el marcador en 21-17.
Causeur protegió al Madrid del arreón griego
Comenzaron las rotaciones. Prepelic tomó el mando de la dirección del juego, y en su primera aparición regaló una asistencia de oro a Ayón. Thompkins se convirtió en el apoyo del esloveno. El Madrid, mientras tanto, mantenía esa renta de entre tres y cinco puntos. Carroll también enchufó y la intensidad defensiva de ambos equipos frenaron los ataques.
La sorpresa positiva para los locales, era la anulación de Calathes. El temido base del equipo visitante, todavía no había podido elaborar su juego. Sin embargo, tras un gancho de Tavares, el americano convirtió su primer triple del partido. Otro triple del cuadro griego puso el 32-31 en el marcador y Laso tuvo que detener el juego. A la salida, Causeur anotó cuatro puntos consecutivos que devolvieron esa pequeña diferencia de la cual estuvo gozando el Real Madrid durante la primera parte.
Otros dos tiros libres del francés y un triple de Thompkins, el cual se mostró muy errático al principio, trajeron al encuentro la máxima diferencia, 41-33. Una canasta de Campazzo posterior a una del Panathinaikos, remarcaron el final del segundo cuarto, 43-35.
El Madrid golpeó y el Panathinaikos respondió
Taylor regresó al juego durante un minuto, pero volvió a deleitarse con un 2+1 y una asistencia a Tavares. Una bandeja de Causeur marcó de salida un parcial de 6-0 para los blancos. Rick Pitino solicitó tiempo muerto inmediatamente.
El francés también estaba en un momento sublime con penetraciones a canasta y bandejas permanentes. No se hizo esperar la reacción del cuadro griego que, con dos triples de Papapetrou, redujo la diferencia a cinco puntos. Otra bandeja de Causeur y un triple de Randolph reabrieron la brecha a diez puntos. De nuevo los griegos reaccionaron y el Madrid se atascó en ataque. Una canasta de Landforg puso el marcador en 56-52. Dos tiros libres de Prepelic pusieron el marcador en 58-52 al término del tercer cuarto.
Agonía hasta el final
Carroll no iba a permitir que su equipo se durmiese y de salida enchufó un triple. Calathes respondió con una bandeja y de nuevo Prepelic transformó un triple. Vougiukas con dos tiros libres y un gancho, puso la diferencia en tres puntos. Pablo Laso tuvo que pedir tiempo muerto ante el acoso de los griegos. A la salida, Calathes anotó un triple con el que empataba el partido. Otro de Thomas puso por delante a los griegos por primera vez en el encuentro.
Hasta cinco puntos arriba se marcharon los visitantes. El Madrid estaba al borde del K.O. y sin remedio para ello. Un triple de Calathes puso la diferencia en seis puntos al cual respondió Rudy. Campazzo y Carroll, con los tiros libres, volvieron a poner por delante al Madrid. Finalmente, el primer asalto se queda en casa tras un final agónico.