El canterano del Estudiantes ha comparecido en zona mixta tras la derrota del conjunto madrileño ante Unicaja. Lo dieron todo, pero evidentemente son tiempos difíciles y no queda otra que sufrir en este tramo final de temporada.
Valoración del partido
"Hemos luchado todo el partido. Hemos estado casi los 40 minutos compitiendo con ellos, pero al inicio del tercer cuarto y del último cuarto sobre todo, ahí es donde ha estado el partido que se nos ha ido en esos dos momentos".
De nuevo, el tercer cuarto lastró a los estudiantiles. Se repitió la misma historia que ante el Gran Canaria aunque esta vez sí hubo réplica local. La diferencia pasó de 13 puntos a tres. No hay explicación ante esa aparente falta de chispa a la salida del vestuario. "No sé por qué sucede. Yo creo que todos salimos siempre intentando dar el máximo y por unas cosas u otras nos está costando arrancar en las segundas partes. Es algo que tenemos que mejorar y lo sabemos".
Cono dijo Berrocal en rueda de prensa, ha faltado un poco más en el rebote defensivo aunque sí que es cierto que la defensa ha mejorado con respecto hace cuatro días. "Es cierto que podíamos haber reducido un poco sus puntos, pero creo que hoy la defensa no ha sido el principal problema. Hemos estado mejor que otros días, pero toca seguir trabajando".
El entrenador del Estudiantes señaló tras el partido ante Gran Canaria que faltaban una o dos victorias para certificar la salvación. Sola no se moja en ese sentido. "No sé (cuantas victorias nos faltan) Yo creo que tenemos que ganar los máximos partidos posibles y luego esperar".
Mensaje optimista
Cuatro huesos duros por delante. No hay otra que creer en que es posible sacar esto adelante porque cabe recordar que el Estudiantes aún depende de sí mismo. ¿Hay motivos para ser positivos? "Por supuesto. Mandamos un mensaje de optimismo desde luego. Sabemos que nos toca un calendario difícil, pero tenemos que sacarlo sea como sea. No hay otra así que vamos a estar a tope".
Con ese mensaje finalizó Adam Sola sus declaraciones posteriores a la derrota del Estudiantes frente al Unicaja. Los jugadores creen y tendrán más que nunca luchar contra todo pronóstico y desafiando a la lógica para salir airoso del infierno.