Segunda jornada de Euroliga y segundo plato fuerte de la temporada para el Real Madrid. Una vez resuelta la dura batalla ante Fenerbahce, un Maccabi en cierta medida renacido, llegaba dispuesto a dar la sorpresa con su equipo renovado. La noticia del día llegó unas horas antes con el fichaje de Salah Mejri y todavía con la incorporación en boca de todos, se aproximaba la hora de comenzar.

Laso volvió a dejar fuera a Thompkins y Reyes, con molestias tras el entrenamiento, y Carroll regresaba al equipo después de su esguince cervical. El Maccabi, que perdió en la primera jornada ante el Khimki, contaba con estrellas como Tyler Dorsey, Nate Wolters, Quincy Acy o Omri Caspi y las jóvenes promesas que destacó el técnico merengue el día anterior como son Yovel Zoosman y Deni Advija. Partidazo de la noche, que empiece el espectáculo.

El Madrid desde fuera y el Maccabi por dentro

El Real Madrid salió con su quinteto habitual: Campazzo, Rudy, Taylor, Randolph y Tavares. Wolters inauguró el marcador con una bandeja. El equipo merengue comenzó con ciertos problemas en el juego interior en ataque debido a la intensidad defensiva del rival que apretó mucho fuera de la zona. Rudy abrió la lata con un triple en el minuto tres que fue respondido por Wilbekin.

Campazzo encontró una vía de escape y el juego comenzó a fluir con Tavares y Randolph de socios. No obstante, todavía había algunos desajustes por lo que Laso detuvo el choque con 10-13 en el marcador. A la salida, Rudy enchufó un triple con falta sobre Randolph que puso al Madrid por delante. Los blancos apretaron con un parcial de 10-2, pero el Maccabi se mantuvo al acecho y Wilbekin logró de nuevo la igualada desde el exterior. El primer cuarto finalizó con un 22-22.

Mickey toma la iniciativa

Los primeros compases del segundo cuarto continuaron con el intercambio de golpes. Laso dio entrada a Mickey, que se erigió como protagonista en el poste bajo tanto en ataque como el defensa. Pese a ello, los blancos no podían escaparse dado el acierto exterior israelí y los pequeños despistes en defensa que no eran perdonados. El espectáculo estaba servido. Los ataques dominaban fuese quien fuese.

Sparopoulos detuvo el partido con 37-32 tras una penetración de Llull y una asociación magistral con Deck. El Madrid pegó el primer tirón y su pequeña laguna fue el acierto desde el tiro libre. Debido a ello, no rompió el partido. El técnico del Maccabi solicitó otro tiempo muerto con 43-34 en el luminoso. La reacción visitante llegó gracias al rebote ofensivo y al resucitado acierto desde el triple. Laso paró el choque instantes después. Un triple de Causeur devolvió algo de margen antes del descanso. 50-44.

El Madrid paga su falta de acierto exterior

Arrancó el tercer cuarto con el tanteo del primero aunque esta vez con falta de acierto. Un triple de Acy volvió a colocar a tiro a Maccabi. El Madrid lo intentaba desde el triple, pero no salía. Un mate estratosférico de Black ante Randolph puso la igualda y un triple de Wolters le dio ventaja al cuadro visitante. Parcial de 0-9 y Laso paró el encuentro.

Otro triple de Dibartolomeo a la salida, continuó con la tormenta. Randolph se rebeló contra ello y, con sangre y sudor, anotó cinco puntos consecutivos (2+1 incluido). Un triple de Campazzo rompió la sequía desde el exterior y devolvió al Madrid la ventaja en el marcador gracias a un 8-0. El Maccabi bloqueó la zona y no había más remedio que intentarlo desde fuera.

Pasó lo peor para el Real Madrid, pero en el ambiente se palpaba la tensión de quien ejecutaría el siguiente golpe y ese fue el Maccabi que, con la picardía de sus jugadores en el interior puso el empate al término del tercer cuarto. 65-65.

El héroe Carroll

El combate llegaba a su último asalto, sería muy difícil hacer un pronóstico de quien saldría victorioso. Al Real Madrid lesurgió un problema y es que entró en bonus en apenas dos minutos. El rebote ofensivo y el ataque interior israelí puso al Maccabi cuatro puntos por encima. 

No tenía buena pinta el transcurso del último cuarto y quizás fruto de ello, llegaron algunas precipitaciones en ataque. Una penetración de Causeur y una canasta de Deck desde la línea de fondo puso de nuevo la igualada. Sparopoulos paró el partido. A la salida, Wilbekin enchufó un triple respondido por Carroll y, de nuevo, el jugador del Maccabi, anotó una bandeja.

El Madrid metió al Maccabi en bonus a falta de tres minutos con 77-77 en el marcador. Wilbekin contra todos y el Madrid se agarraba como podía, pero sin frenar la anotación visitante. Luchas, cuerpos a cuerpos y empate a 81 a falta de un minuto para el final. Campazzo falló el triple para poner al Madrid por delante y Wilbekin puso a los suyos de nuevo por delante con dos tiros libres. Wolters y Dibartolomeo llegaron a la quinta falta personal. Mickey llegó a la línea de tiros libres y anotó los dos.

Tiempo muerto a falta de 27 segundos para el final con 83-83. Wilbekin realizó otra exhbición para anotar a falta de diez segundos. Tiempo muerto solicitado por Laso y el Madrid tenía la última para empatar o ganar el partido y Carroll repitió su triple meteórico a falta de dos segundos. Tiempo muerto de nuevo y la última del Maccabi.... se perdió. Triunfo apoteósico y sufrido del Madrid que sigue invicto.