Quintetos titulares
Morabanc Andorra: Frantz Massenat, Bandja Sy, David Walker, Jeremy Senglin, Dejan Musli.
Movistar Estudiantes: Phil Pressey, Phillip Scrubb, Aleksa Avramovic, Kenny Kadji, Víctor Arteaga.
La intensidad sigue siendo innegociable para el Estu
El partido comenzó con un Estudiantes encendido. Después de la victoria de mérito contra el Unicaja en casa, los colegiales salieron enchufados, con un juego coral y una defensa tan efectiva como en los mejores momentos de la temporada. Sin embargo, progresivamente el Andorra se fue recuperando.
De mano de Bandja Sy, el equipo pirenaico abrió un parcial de 10-0 que les permitió remontar el 2-10 inicial. Los jugadores de Ibón Navarro vieron que al forzar a Pressey a lanzar en malas posiciones, todo el ataque de los del Ramiro se resentía. Dangubic, Palacios y Kadji cometían errores personales que desencadenaban pérdidas. Además el daño era mayor, porque permitía a los locales correr que es lo que más les gusta.
Javi Zamora pidió tiempo muerto, pero no pudo cortar la proyección de su rival. Frantz Massenat se echó el Andorra a las espaldas, no solo con acierto en el tiro, sino asistiendo a sus compañeros. Toney Douglas paró el parcial, pero el daño estaba hecho. Andorra ya se había escapado por ocho puntos, diferencia que aumentó con la presencia en cancha de Clevin Hannah y del pívot Moussa Diagne, que volvía de lesión. Al final del primer cuarto, los andorranos ganaban por 23-14.
El Estu se ponía por encima, pero Andorra luchaba
El Estudiantes salió del periodo entrecuartos con la lección aprendida. No se podían permitir relajarse. Cuando su intensidad bajaba, su rival recuperaba el ritmo anotador y se escapa en el marcador. Kenny Kadji fue el encargado de anotar cinco puntos consecutivos para colocar a los suyos a apenas cuatro tantos, en posición para luchar por el encuentro.
Con el paso de los minutos, los colegiales se fueron acercando en el marcador poco a poco. Además de Kadji, su socio en la zona, Palacios, y Pressey aportaron puntos. Aunque el base hijo de la leyenda de los Milwaukee Bucks había empezado la cita con varios fallos en el tiro. El partido se volvía a trabar, lo que aprovecharon los visitantes para, tras un triple de Kadji, ponerse por delante.
Sin embargo, Massenat y el Andorra volvieron a reaccionar para irse al descanso con cinco puntos de colchón ante una segunda parte que se presentaba muy competida e igualada.
El Estu soñó con la victoria, pero se le escapó al final
Los primeros minutos del tercer cuarto se caracterizaron por la falta de acierto. Ningún equipo le quitaba la tapa al aro por múltiples tiros errados y pérdidas de balón. El Andorra fue el primero en acertar, ampliando su ventaja hasta casi los diez puntos. Cuando el Estu tenía que recuperarse para no perderle la cara al encuentro, Pressey apareció y robó un balón. Esa recuperación le permitió anotar al contraataque. El base estadounidense siguió rindiendo en defensa y asistió a Scrubb para que el canadiense sumara seis puntos seguidos.
Durante los siguientes minutos, el Morabanc volvió a recuperarse. El Estudiantes no podía mantener su esfuerzo, por lo que los pirenaicos recuperaron su ventaja cercana a los cinco puntos. Los de Javi Zamora se vieron forzados a volver a empezar a trabajar desde el lugar que ocupaban al descanso.
Sin embargo, encararon el desafío sin miedo. Rápidamente se pusieron a un solo punto y un fallo en el pase de Pressey le permitió a los locales mantener el liderato. La remontada se acabó consumando con una canasta tras rebote de Arteaga. De esta manera, se entró en un periodo en el que ambos contendientes se intercambiaron en la posición de dueños del encuentro.
El Estudiantes, como paso el día del Unicaja, buscaba la victoria a través de la intensidad. Los jugadores locales recibieron una charla de Ibón Navarro tras la cual recuperaron la desventaja, que ascendía a seis puntos a falta de dos minutos. La respuesta de los jugadores fue tal, que el parcial llegó a 10-0, el Estu no anotó en cuatro minutos y la victoria se quedó en el Principado (69-65).