La Fuente de San Luis acogía un partido tenso debido el duelo directo por los playoffs. El encuentro se dividió en dos Partidos completamente distintos. Fue en el primer tiempo cuando el encuentro era muy parejo e incluso el Burgos se colocaba por encima del marcador. Sin embargo, en el tercer cuarto los valencianos se pondrían el mono de trabajo y con una buena defensa elevarían la renta a 20 puntos, una cifra de la que los visitantes no pudieron bajar.

Encuentro muy parejo

El encuentro comenzaba con bastante paridad en el juego. Ambos conjuntos salieron muy intensos con los objetivos claros, hacer que costase un mundo meter una canasta. Precisamente eso es lo que pasó, tanto el Valencia como el Burgos comenzaban con una anotación bastante baja debido a las fuertes defensas que propusieron. El Valencia Basket detuvo más el juego al tratar de hacer ataques largos y pausados buscando las continuaciones en el Pick and Roll y los balones interiores. Tan solo Abalde anotaba con relativa facilidad.

Burgos imponía un plan completamente contrario al de los hombres de Ponsarnau. De la mano de Ferran Bassas surgían todos los ataques de los burgaleses y era el base el que decidía cuando se corría y cuando se buscaría una opción más pausada. Los visitantes, más acertados desde el arco que los taronjas, se colocaban por delante a falta de tres minutos para acabar el encuentro. Finalmente, Quino Colom subiría el ritmo del Valencia y lo colocaría a tan solo un punto al final del primer cuarto, 15 a 16.

Valencia Basket sube la intensidad defensiva

En el segundo cuarto Ponsarnau cambió el plan de partido. Doornekamp y Labeyrie subirían las líneas de pase y unos cuantos robos de ambos y la excelsa dirección de Quino Colom amagarían con romper el partido. Tras un parcial de 16 a 9 Joan Peñarroya pedía tiempo muerto para subir la intensidad de los suyos, y es que el plan le funcionó. De la mano de McFadden y de Clarck los burgaleses se mantenían en el encuentro y seguían de cerca en el marcador.

El Valencia Basket conseguiría destapar el triple con sendas acciones de Dubljevic y de Doornekamp. Además, Peñarroya optaba por mantener a dos escoltas en el campo, lo que provocó que el alero canadiense hiciese daño desde la pintura a Benite. Esto acabaría por romper el partido y colocar un más ocho para Valencia que los taronjas ampliarían al final del cuarto. Tan solo los rebotes ofensivos, un quebradero de cabeza para los taronja, permitían al San Pablo Burgos mantenerse a poca distancia de los locales. Sin embargo, una gran acción de Abalde al final del primer tiempo pondría a los valencianos con la máxima del partido, 12 arriba y un marcador de 43 a 31.

Los taronja pasan el rodillo

El Valencia Basket salió de los vestuarios con una intensidad digna de los últimos cuartos apretados. Todos en el equipo valenciano sumaban en las distintas facetas del juego. Comenzaron a agrandar la ventaja hasta la máxima de 18 puntos. Mientras tanto el San Pablo Burgos no encontraba respuestas ni en ataque ni, sobre todo, en defensa donde se vieron sobrepasados por los locales.

El equipo valenciano mejoró el acierto desde el arco, con los grandes haciendo daño desde el 6,75. Tobey con tres triples y Labeyrie con otro pondrían la máxima al partido. Los de Burgos tratarían de recortar distancias, pero una antideportiva de Benite sobre Sastre devolvía el más 16 al marcador. Peñarroya pedía tiempo muerto para animar a los suyos e insistir en complicar más a los pívots los tiros desde el arco. No obstante, el Valencia Basket seguiría ampliando la ventaja hasta el final del tercer cuarto, el cual acabaría con un marcador de 71 a 45. Ante esta situación, Ponsarnau probaría a Vives en los últimos compases del cuarto.

El último cuarto siguió con la estela del anterior. El Valencia Basket seguía moviéndose entre las ventajas de 20 puntos. Ante esta situación Peñarroya decidió dar más minutos a aquellos menos habituales. Lo mismo hizo Ponsarnau, dando entrada tanto a Vives como a Motum. El australiano pudo acabar el encuentro con buenas sensaciones y 11 puntos tras no ser convocado en varias situaciones y de una temporada llena de altibajos.

Abalde colocaría la máxima del partido a falta de dos minutos por jugarse con un gran dos más uno. El luminoso señalaba el 92 a 63 y Peñarroya pedía un último esfuerzo a los suyos para tratar de acabar con buenas sensaciones un encuentro muy complicado para el Burgos, sobre todo a nivel anímico al ser el Valencia un rival directo.

El partido acabó con un marcador final de 95 a 66. El Valencia Basket hizo un encuentro muy serio en el que no dejó de competir en todo el tiempo y logra una victoria contundente. Por el otro lado el poco acierto desde el arco, tan solo un 27%, acabó pasando factura a un Burgos que se aleja de los playoffs, pero todavía con opciones reales de entrar. Partido muy coral de los valencianos, con hasta cuatro jugadores superando la decena de puntos. Por parte de los burgaleses destacaron Benite con 11 puntos y Fitipaldo, saliendo desde el banco, con 13 tantos.

Ficha técnica

Incidencias: partido correspondiente a la Jornada 22 de la Liga Endesa disputado en la Fuente de San Luís ante 6785 espectadores.

95 - Valencia Basket (15+28+28+24): Abalde (15), Sastre (6), San Emeterio (5), Ndour (2) y Tobey (9) - Cinco inicial - Marinkovic (4), Colom (8), Dubljevic (7), Doornekamp (14), Labeyrie (14), Vives y Motum (11)

66 - San Pablo Burgos (16+15+14+21): Bassas (2), Benite (11), Barrera (6), Clark (8) y Lima (4) - Cinco inicial - McFadden (6), Fitipaldo (13), Salvó (3), Vega, Apic (9), Vega y Rivero (4)

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