En la búsqueda de culpables a la mala situación de los Philadelphia 76ers, uno de los más señalados ha sido el pívot Al Horford. El ex jugador de los Boston Celtics no está ofreciendo su mejor nivel en la ciudad de la campana y muchos son los expertos que apuntan que se está barajando un posible traspaso. Las causas que lo han motivado, más allá de la edad, rendimiento en cancha o salario; es la necesidad de alargar la plantilla en el apartado exterior. El buscar una pieza que aporte puntos desde las alas o puestos exteriores, se antoja clave para un equipo que es dependiente de Ben Simmons y Joel Embiid.

Los números que acredita el dominicano son muy pobres en base a lo que venía ofreciendo en Boston. A día de hoy está firmando unos números que no se veían desde su etapa en Atlanta en 2008. Pese a que los 33 años es un factor determinante, el rol de Horford en el equipo condiciona el desarrollo de la estrategia. Con Horford, Brett Brown ganaba músculo y defensa, pese a que perdía opciones exteriores, más aún con las salidas de jugadores específicos que aportan muchos puntos como J.J. Redick.

Aunque nadie duda de la importancia del cinco veces all star en enfrentamientos específicos en postemporada, la mera dependencia del equipo en grandes actuaciones de Embiid y Simmons (de vez en cuando se suma Tobias Harris) hace que pensar a la hinchada de los Sixers que considera que están desaprovechando un gran proyecto. Donde el objetivo primordial debería ser luchar por el anillo. Pero hablamos de una plantilla configurada de tal manera que el principal competidor por el puesto de Horford, es la estrella Joel Embiid. 

El dominicano es una difícil pieza para mover, pues nos encontramos ante un jugador de 33 años que tiene firmado 109 millones de dólares por cuatro temporadas. Una cifra bastante elevada para un jugador que está lejos de su mejor momento. A día de hoy, con Embiid y Simmons lesionados, los Sixers marchan sextos del Este, con el objetivo de lograr la ventaja de campo, los de Brett Brown buscarán en el mercado una pieza de cambio decente para fortalecer su juego exterior y aligerar la zona.