La ciudad de Los Ángeles, es tradicionalmente, una de las mejor consideradas (baloncestísticamente hablando) en Estados Unidos, por el éxito histórico que han tenido los Lakers (en California desde 1960), acompañado además, de jugadores y entrenadores legendarios. Recientemente, los vecinos Clippers, con quienes comparten pista (Steve Ballmer, el propietario, se ha movido recientemente en búsqueda de una cancha propia para su equipo), han querido sumarse al show. Con una apuesta que incluía a Chris Paul y Blake Griffin que no dio los resultados esperados, comenzaron una reconstrucción que les ha permitido volver a ser uno de los equipos más competitivos de la liga. Con la llegada de Kawhi Leonard y Paul George a la disciplina de Doc Rivers, los de púrpura y oro han perdido el monopolio baloncestístico de LA.

​Frank Vogel (de espaldas) saluda a Doc Rivers durante el encuentro del 25 de diciembre de 2019 | Foto: Andrew Bernstein, GettyImages
​Frank Vogel (de espaldas) saluda a Doc Rivers durante el encuentro del 25 de diciembre de 2019 | Foto: Andrew Bernstein, GettyImages

Lakers

La franquicia púrpura y oro, baila bajo la batuta del ‘coach’ Frank Vogel, que antes de asumir el banquillo angelino había pasado dos temporadas en Orlando y seis en Indiana, en las que consiguió meter en los Playoffs a los Pacers en cinco. Cuenta además, con la asistencia de un exjugador excepcional como Jason Kidd, que ya estuvo al mando de Nets y Bucks, y del experimentado entrenador para el desarrollo de jugadores Phil Handy, que ha trabajado como asistente en equipos ganadores como Toronto (2018-19) y Cleveland (2015-16).

El equipo, tras no clasificar para Playoffs la temporada pasada (quedando en 10ª posición), ha logrado esta campaña llegar a la suspensión liderando la Conferencia Oeste, en posesión del segundo mejor balance de la liga (49-14). Lo han conseguido siendo muy consistentes y permitiendo pocas rachas negativas, siendo 4 el mayor número de derrotas consecutivas acumuladas. Como contraposición, han logrado reunir, en distintos tramos de la temporada, siete (en tres ocasiones), nueve y diez victorias consecutivas.

Esta regularidad en el juego, les ha llevado a lo más alto. Todo ello, ha venido impulsada por sus dos estrellas, que apenas se han perdido encuentros. LeBron ha jugado 60 de las 63 citas, mientras que Anthony Davis solo ha faltado a 8, cinco de los cuales fueron consecutivos tras aquejar molestias en la espalda. De todas sus ausencias, el equipo solo cayó derrotado en dos, evidenciando el liderazgo que ejerce LeBron. ‘El Rey’, que ha registrado 13 triples-dobles a lo largo de la temporada, no ha dado muchos signos de estar lejos de su mejor juego; promedia 25,7 puntos, a los que añade 10,6 asistencias y 7,9 rebotes por partido, demostrando que sigue siendo un jugador que impacta de muchas maneras el desarrollo de los partidos. Su compañero Anthony Davis, suma más puntos y rebotes por choque (26,7 y 9,4 respectivamente), pero no cuenta con los galones necesarios para llevar completamente las riendas del equipo.

​Anthony Davis (izquierda), defendido por Paul George | Foto: Andrew Bernstein, GettyImages
​Anthony Davis (izquierda), defendido por Paul George | Foto: Andrew Bernstein, GettyImages

El quinteto inicial suele estar completado por el veterano tirador Danny Green (8,2 puntos y 1,2 robos por noche), el exterior Kentavious Caldwell-Pope y el ‘center’ JaVale McGee. Los Lakers, cuentan con buena profundidad en su banquillo, que mejoraron tras incorporar a Markieff Morris en febrero y posteriormente, a Dion Waiters en marzo (para lo que tuvieron que desprenderse de Troy Daniels). En su segunda unidad, ya contaban con jugadores como Kyle Kuzma, Rajon Rondo, Alex Caruso, Avery Bradley o Dwight Howard, que sirven de refresco a los titulares y mantienen la intensidad. Es destacable que Kuzma (12,5 puntos por encuentro) y Bradley (8,6 points per game) estén entre los cinco máximos anotadores del equipo, cuando ellos salen desde el banquillo.

El juego de los angelinos, se ve beneficiado por lo bien que encajan las piezas entre sí: LeBron, gracias a su magnífica visión de juego, es capaz de surtir de balones a los exteriores como Green, Caldwell-Pope o Caruso, pero también puede usar el ‘pick and roll’ para conectar con los jugadores interiores. Si las opciones colectivas se acaban, los aclarados para LeBron, Anthony Davis (más orientado al juego en el poste) o incluso Kuzma, pueden resolver un aprieto. Además, cuando los titulares descansan, el balón sigue circulando bajo el criterio de Rajon Rondo, un gran base que promedia 5 asistencias por partido. El conjunto destaca en la faceta defensiva, pues lidera los tapones por partido con 6,8, y es 4º en robos con 8,6; además, es el tercer equipo que menos puntos concede, con 106,9.

Con todo, los Lakers se han mostrado como un equipo muy sólido que ha estado en la élite de la competición desde el comienzo de la misma, y era (a pesar de no haber podido contar con DeMarcus Cousins, que fue cortado) uno de los candidatos más claros a disputar la final representando a la Conferencia Oeste.

Clippers

El ‘hermano pequeño’ o el equipo olvidado de la ciudad de Los Ángeles, estaba decidido a apostarlo todo esta temporada; se hicieron con Kawhi Leonard, después de que este obsequiara a Toronto con el primer campeonato de su historia, y lo emparejaron con otro jugón, Paul George. La conexión de George con Westbrook en Oklahoma no había los frutos esperados, y el base marchó a Houston con Harden, mientras que PG-13 encontró un nuevo hogar en Los Ángeles. Para obtener a George, los Clippers dejaron  marchar a Danilo Gallinari y al prometedor Shai Gilgeous-Alexander, además de una gran cantidad de elecciones de Draft. Las dos estrellas llegaron a un equipo que ya tenía una marcada identidad y un núcleo interesante de jugadores, como Patrick Beverley, Lou Williams, Montrezl Harrell o Ivica Zubac. Con la adición de estos dos cracks, el equipo se colocaba inmediatamente como candidato al anillo, no solo por el mejorado potencial ofensivo, sino también porque tanto George como Leonard son unos defensores de élite en el perímetro.

El conjunto está dirigido desde la temporada 2013-14 (año en el que consiguió su mejor récord con la franquicia, 57-25) por el experimentado entrenador Doc Rivers, que ya fue campeón con los Celtics en la temporada 2007-08. Rivers, cuenta con la asistencia de Tyronn Lue, que conoce de primera mano a LeBron James y también sabe lo que es ganar un campeonato como entrenador, pues levantó el trofeo Larry O’Brien con ‘El Rey’ en la 2015-16.

Tras una octava plaza final el año pasado que les dio acceso a unos Playoffs, en los que cayeron en primera ronda contra los Warriors (liderados por un inspirado Kevin Durant, que anotó 50 puntos en el partido que los eliminó), han mejorado considerablemente este curso, situándose en la segunda plaza del Oeste, con un récord de 44 victorias y 20 derrotas, el tercer mejor de la liga. Es destacable que se hayan aupado hasta esa posición, teniendo en cuenta que su pareja de estrellas no ha disputado todos los encuentros hasta la suspensión. Kawhi Leonard ha estado presente en 51 de ellos, justificando sus ausencias como descansos necesarios para llegar en condición óptima a unos Playoffs, que salvo catástrofe, iban a disputar. Paul George, por su parte, ha jugado 42 partidos, perdiéndose el principio de la temporada, pues estaba recuperándose de operaciones en los dos hombros, además de algunos encuentros a mitad de temporada por molestias en los isquiotibiales.

Es un equipo que suele realizar una considerable distribución de los minutos, posibilitada por una buena amplitud de banquillo, que cuenta con figuras de calidad como Landry Shamet, el veterano sexo hombre Lou Williams, Montrezl Harrell o las incorporaciones en febrero de Reggie Jackson y Marcus Morris (este a cambio de Maurice Harkless). Además, a principios de marzo habían logrado firmar al veterano Joakim Noah, probablemente con la intención de añadir garra a la defensa y reforzar la plantilla pensando en la postemporada.

En los encuentros que han disputado, Kawhi Leonard contribuye con 26,9 puntos, 7,3 rebotes y 5 asistencias; ‘The Klaw’, no es solo un anotador fiable, sino que trabaja bajo los tableros y distribuye bien la bola. George, por su parte, aporta 21 puntos, 5,3 rebotes y casi 4 asistencias, por lo que también es un jugador muy completo. Además, entre los dos logran 3,1 robos de balón, por lo que son una gran amenaza defensiva, a la que se une en el perímetro el afamado Patrick Beverley. Cuentan además con la ayuda de Lou Williams, ganador del premio al Sexto Hombre del Año en tres ocasiones; ‘Lou-Will’ anota 18,7 puntos desde el banco, y es el máximo asistente del conjunto, con 5,7 entregas por partido. El exterior, se asocia a las mil maravillas con Harrell (sustituto de Ivica Zubac), que encesta 18,6 puntos y captura 7,1 rebotes desde el banco. Esta pareja ofrece una gran continuidad a los titulares, y garantiza que los minutos de los suplentes sean de calidad. Con estas piezas, los Clippers son sobre todo peligrosos desde el perímetro, pero con armas como Harrell, Zubac o Morris también pueden crear problemas por dentro.

Rajon Rondo (#9) y Lou Williams (#23) aguardan al lanzamiento de un tiro libre | Foto: Andrew Bernstein, GettyImages
Rajon Rondo (#9) y Lou Williams (#23) aguardan al lanzamiento de un tiro libre | Foto: Andrew Bernstein, GettyImages

El equipo que dirige Rivers, se encuentra en el top 5 tanto en el apartado de rating ofensivo como en el defensivo (también los Lakers), pero anota más puntos que los de Vogel (116,2 frente a 114,3). Aunque no son tan seguros defensivamente (encajan 2,7 puntos más que los Lakers), los Clippers compensan la balanza en otros apartados estadísticos; tienen mejores porcentajes en los tiros de 3 puntos, 36,6% frente a al 35,5% de los de púrpura y oro. Curiosamente, a pesar de encajar más puntos, los Clippers consiguen que el porcentaje de acierto de sus rivales sea de un 43,6%, mientras que los Lakers permiten un 44,4%.

Enfrentamientos esta temporada

Los equipos angelinos se han medido esta temporada en tres ocasiones de las cuatro estipuladas; aquella en la que no lo hicieron corresponde al 28 de enero, fecha que se aplazó hasta abril en consideración a los Lakers por el luto tras el trágico fallecimiento de Kobe Bryant dos días antes al partido.

La primera ocasión en la que se vieron las caras, fue en el partido inaugural de la temporada, el 22 de octubre. En ese encuentro, los chicos de Doc Rivers se impusieron por 112 a 102, en un encuentro en el que LeBron, Davis y Danny Green combinaron para 71 puntos (18, 25 y 28 respectivamente), pero el resto de Lakers apenas aportaron. Los Clippers, a pesar de la ausencia de George, mostraron una anotación más consistente: Leonard (30), y desde el banquillo Lou Williams (21), Montrezl Harrell (17), JaMychal Green (12) y Maurice Harkless (10).

La siguiente vez que se enfrentaron, fue el día de Navidad, 25 de diciembre. De nuevo, salieron victoriosos los Clippers (111-106). En ese choque, Davis y Lebron anotaron 24 y 23, pero el mayor anotador de los Lakers fue Kuzma con 25. ‘El Rey’, rozó el triple-doble, añadiendo a sus puntos conseguidos 10 rebotes y 9 asistencias. En los Clippers, el mejor anotador fue Leonard (35), que además lo hizo con buen acierto: 11 de 19 en tiros de campo y 8 tiros libres sin fallo. Acompañaron George con 17, Harrell con 18 y Zubac con 11. Los Clippers aventajaron a sus vecinos tanto en rebote (50 frente a 42) como en efectividad desde el triple (36% contra un 29,4%).

​​​​​​​​Los gemelos Morris, Markieff (#88) y Marcus (#31), durante el partido del 8 de marzo | Foto: Andrew Bernstein
​Los gemelos Morris, Markieff (#88) y Marcus (#31), durante el partido del 8 de marzo | Foto: Andrew Bernstein

El tercer partido (disputado el 8 de marzo de 2020), lo lograron ganar los Lakers, con un marcador final de 112 a 103. En este encuentro, hubo 3 jugadores de cada equipo que anotaron al menos 20 puntos; en Lakers fueron James (28), Davis (30) y Bradley (24), que destacó con un 6/12 en triples. En Clippers, correspondió a Leonard (27), George (31) y Harrell (20). La diferencia se percibió en la distribución del balón: Lakers dio 22 asistencias por tan solo 12 de los Clippers.