El regreso del deporte en Estados Unidos está cada vez más cerca, y con ello el regreso de la NBA. Así lo han confirmado los gobernadores de Nueva York, California y Texas, estados muy importantes dentro del país. Tras más dos meses de parón en el mundo del deporte, comienzan a aparecer buenas noticias.
El primero en abrir la puerta a la vuelta del deporte fue Andrew Cuomo, gobernador de Nueva York, al comentar que han estado dando instrucciones a los equipos de las grandes ligas sobre la reapertura de sus instalaciones, pero sin aficionados. Según palabras de Cuomo, “Hockey, baloncesto, béisbol o fútbol, cualquiera puede reabrir. Desde las instituciones estatales somos un compañero que está preparado, capacitado y deseoso de volver a tener deporte profesional. Creo que es lo mejor para el interés de todo el mundo y, por supuesto, para el interés de Nueva York”.
El gobernador de California, Gavin Newson, afirmó que el deporte profesional podría volver en su estado en “la primera semana de junio”, pero sin aficionados y con condiciones obligatorias. Para que esto suceda es clave que "los casos y las hospitalizaciones en el estado continúen disminuyendo".
Por último, Greg Abott, gobernador de Texas, se muestra todavía más optimista, poniendo la última semana de mayo como posible fecha para la vuelta del deporte profesional sin aficionados. Además, afirmó que las ligas menores y escolares de béisbol podrían regresar con la posibilidad para los padres de acudir a los partidos, pero siempre manteniendo el distanciamiento social.
Estos se suman a los gobernadores de Florida y Arizona, que ya han afirmado con anterioridad que sus estados están preparados para la vuelta del deporte.
Estas medidas no son todavía nada concreto, pero ofrecen brotes verdes y esperanzas sobre el regreso de la liga de baloncesto más importante del mundo. Siempre que la salud lo permita, la vuelta de la NBA podría estar más cerca de lo que pensamos.