El primero de los duelos contra Gran Bretaña acabó de manera positiva para los de Orenga. Consiguieron superar una primera parte complicada (35-35 al descanso), despegándose en los segundos veinte minutos. Pablo Aguilar y San Emeterio con 12 y 10 puntos respectivamente, bajo la magnífica dirección de Ricky Rubio recuperaron el juego de la selección que notó la resaca de Francia. Por parte de los británicos destacó Kyle Johnson con 15 puntos.

Comienzo difícil

Los parciales marcaron el primer periodo

De parcial en parcial, sin un dominador claro, transcurrieron los primeros compases del encuentro. España apareció y despareció conforme pasaban los minutos, a veces con la cabeza todavía en el largo viaje desde Montpellier. Comenzó apuntando maneras con un 5-0, pero los británicos respondieron con un 0-7. Aparecieron Claver desde el triple y Rudy por partida doble y devolvieron el 7-0. Al poco, el del Real Madrid volvió a ser protagonista en un ‘alley-oop’ tras combinarse con Ricky, retornando a los tiempos de la ‘doble R’ en el Joventut. Y para finalizar, siguiendo la dinámica, los de Joe Prunty asestaron un 0-6 que fue respondido con un 7-0 bajo la dirección del ‘Chacho’ (21-20, min. 10).

El motor nacional siguió sin revolucionar en el segundo periodo, donde los fallos estuvieron por encima de los aciertos. Gran Bretaña se resistía a desengancharse del partido e incluso alcanzaron una ventaja de tres puntos en una ocasión (29-32, min. 16). Fue el momento que eligió Orenga para solicitar su segundo tiempo muerto y la selección logró recuperarse hasta el 35-35 antes del descanso.

Aguilar y San Emeterio lideran el despegue

Pablo Aguilar destacó desde el perímetro

España se desperezó tras volver de los vestuarios y empezó a parecerse al equipo que pudo vencer a la poderosa Francia en dos ocasiones. Con Ricky al mando, los jugadores se contagiaron de su magia y el ritmo aumentó. Aguilar anotó un triple que amplió la diferencia hasta nueve puntos (48-39, min. 24) y Xavi Rey hizo olvidar por momentos a un Marc Gasol que no estuvo a su mejor nivel. Sin embargo, al final del cuarto los de Orenga volvieron a bajar el pistón y los británicos lo aprovecharon situándose 59-54.

Fue en el último parcial cuando el combinado español se encontró a sí mismo. Johnson y compañía se convirtieron en un juguete para los habituales suplentes locales. San Emeterio cogió el relevo de Aguilar y acabó con Gran Bretaña a base de tiros exteriores, demostrando que también hay aleros de confianza. La brecha se abrió hasta los 19 puntos (78-59, min. 38) y los minutos finales fueron un trámite en un Palacio de Deportes murciano entregado. El luminoso terminó en 80-67.

Reedición este jueves

Este jueves el Pabellón Príncipe Felipe de Zaragoza acogerá un nuevo enfrentamiento entre España y Gran Bretaña. La selección intentará terminar con buen pie la RutaÑ13, a pocos días del comienzo del Eurobasket en Eslovenia (4-22 de septiembre).

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