Reverdeciendo, aunque sea de forma efímera, viejos laureles Olimpia Milán se concedió este viernes una de sus mayores alegrías en los últimos años venciendo por 82-83 a Baskonia en el Fernando Buesa Arena. La mítica escuadra roja, otrora tres veces campeona de Europa, lleva ya muchos años inmersa en una travesía del desierto sin atisbar siquiera el horizonte. Empeñado en recuperar su legendario dominio en Italia, su errático devenir continental a pesar de la victoria de prestigio conseguida en Vitoria-Gasteiz le mantiene en las últimas posiciones de la Euroliga (6-13), casi sin opciones reales de meterse en play-off. Un objetivo que comienza a complicarse para el conjunto azulgrana, que con un balance de 8-11 ve cómo se aleja Maccabi Tel Aviv (10-9), equipo que marca el corte a falta de once jornadas para el final de la liga regular.

Dominio italiano en la primera parte

Theodore y Beaubois inauguraban el marcador de un partido que arrancó con Baskonia cerrando bien el rebote defensivo para salir corriendo y encontrar al hombre libre. Poirier y Shengelia dominaban la pintura mientras Beaubois forzaba desde el triple el primer tiempo muerto de Simone Pianigiani (9-2, min. 3). Los italianos insistían en mover el balón por fuera, tratando de superar la buena defensa azulgrana en el perímetro. Dos pérdidas y un error en el tiro espolearon al Olimpia Milano, con Goudelock asistiendo a Kuzminskas en una acción de dos más uno y Micov anotando dos triples consecutivos (11-14, min. 7). La entrada de Vildoza tras el tiempo muerto local no cambió el panorama hasta el final del primer cuarto, con Theodore y Goudelock superando a la dupla formada por el base argentino y Granger (19-22).

Milán, al ritmo de Theodore y Goudelock

El segundo acto comenzó con Kevin Jones anotando desde el triple en el primer balón que tocaba. Por dentro Gudaitis, Kalnietis y Bertans estaban dispuestos a poner a prueba la versión continental de Voigtmann, que respondió con cinco puntos seguidos (29-33, min. 14). Bertans, Jerrells y el propio Voigtmann se retaban en un tramo de mayor ritmo, con los ataques superando a las defensas. Solo la infame actuación de M'Baye, fallando dos triples librados y 'aportando' dos pérdidas de balón consecutivas, impedía a los italianos despegarse en el marcador (32-37, min. 17). Un rebote ofensivo convertido en dos puntos por Poirier y un contraataque culminado en mate por Shengelia encontraban la respuesta de Goudelock y Kuzminskas desde el triple (36-45, min. 19). Olimpia Milano estaba siendo capaz de defender bien sin cometer apenas faltas, sustentando de este modo una buena ventaja al descanso (36-47).

Protagonismo arbitral en el tercer cuarto

El juego de pase estaba favoreciendo a los italianos (13 asistencias), con mejor control de balón que Baskonia (ocho pérdidas). Quedaba por ver si el paso por vestuarios haría reaccionar a los de Pedro Martínez. El equipo empezó el tercer cuarto más atrevido en ataque, con un triple de Timma mientras Poirier y Shengelia trataban de hacerse fuertes bajo ambos aros y Goudelock, Micov y Granger se desafiaban desde el arco (46-57, min. 24). El criterio del trío arbitral tras el descanso castigaba la intensidad defensiva azulgrana, entrando pronto en bonus. Por si fuera poco, Tarczewski obligaba al técnico local a solicitar tiempo muerto tras una poderosa entrada a canasta (47-59, min. 25). La reacción de raza liderada por Granger era sofocada de manera inmediata por Jerrells y Gudaitis (54-64, min. 28). Los árbitros tomaron el protagonismo de los últimos minutos del período repartiendo faltas personales, técnicas y antideportivas por doquier, pero Baskonia apenas fue capaz de recortar distancia (56-65).

La reacción baskonista no llegó a tiempo

El empecinamiento de Jerrells en jugarse todos los ataques italianos salvaba el desacierto baskonista desde el triple (59-65, min. 32). Con ocho minutos por delante, la sensación era que el partido solo podía perderle Olimpia Milano. Pero no. Justo tras el tiempo muerto de Pianigiani, canasta tras robo de Bertans y cinco puntos consecutivos, triplazo incluido, de Theodore (59-72, min. 34). Por fin Beaubois conectaba desde el perímetro para liderar la insurrección azulgrana, secundada por Jones y Granger. Goudelock anotaba al tiempo que cometía su cuarta falta personal, coincidiendo con una canasta de Shengelia (68-74, min. 36). Granger y Theodore se empeñaban en añadirle emoción al partido, pero esta vez con sus fallos en la dirección del juego. Un palmeo de Shengelia y un triple de Timma dejaban todo abierto a falta de dos minutos (75-76, min. 38).

Shengelia hizo estallar al Buesa Arena con un mate que establecía el empate (77-77). Pero Bertans se hizo con un valioso rebote ofensivo que propició tres tiros libres para Goudelock, que no perdonó desde la línea (77-80). El tiempo muerto de Pedro Martínez tuvo un efecto inmediato con un triple de Beaubois, que sumó además otro acierto a aro pasado. Pero la última palabra iba a ser para Theodore, con un canastón a falta de seis décimas que decidió el triunfo para Olimpia Milano (82-83). Shengelia tuvo el balón para ganar, pero su lanzamiento en el aire tras recepción a dos manos no encontró la cesta rival.

La próxima cita para Baskonia será este domingo 21 de enero (18:30 horas), cuando recibirá la visita del Real Betis Energía Plus. Con un balance de 9-7, el equipo de Pedro Martínez parte con el objetivo de cerrar la primera vuelta sellando en casa su pase a la Copa del Rey ante el colista de la Liga Endesa ACB. Para el jueves 25 de enero (20:45 horas) quedará el siguiente duelo en Euroliga, midiéndose al Unicaja Málaga en el siempre complicado José María Martín Carpena.