Un partido que no podría llegar en peor momento. Así pensarán los aficionados del Bilbao Basket ya que la marcha del equipo en lo que va de temporada no podría ser peor. Con la última derrota del equipo en Alemania, ante EWE Baskets, que puso fin a 23 partidos de imbatibilidad en Fase Regular, hay conciencia de que el patinazo del derbi puede ser síntoma de algo mucho peor que un simple "mal arranque de temporada".

De nada sirven ya las poco esperanzadoras palabras de jugadores y técnicos insistiendo en que "el método es bueno" y "las victorias ya llegarán", como aseguraba Germán Gabriel hace semanas. La sombra, no solo de quedar fuera de Copa del Rey y de Playoffs ronda por los alrededores de Miribilla, sino de un hipotético descenso, si no hay un cambio drástico de actitud y de juego; un descenso que, en caso de consumarse, podría acarrear la desaparición del club bilbaíno.

El FC Barcelona, por otro lado, llega a Bilbao como un equipo en alza. Colíderes e invictos en Liga, dispuestos a batir al rival más débil, tendrán la obligación de sumar para no descolgarse de Real Madrid y Herbalife Gran Canaria, con tres victorias en Eurocup, los catalanes están dispuestos a tomarse la revancha por las dos derrotas cosechadas el curso pasado en el Bilbao Arena. Pese a todo, son la bestia negra del Bilbao Basket y hoy estarán dispuestos a hundirle un poco más si cabe.

Bajas en ambos equipos

Por parte del conjunto local, la única duda de disponibilidad es la de Álex Mumbrú, uno de los jugadores más peligrosos del equipo de Rafa Pueyo, con el que no pudo contar para el partido ante EWE Baskets, en el que fue sustituido por Zoran Vrkic, con un más que discreto resultado (ningún tiro a canasta en todo el partido).

Hay conciencia de que el patinazo del derbi puede ser síntoma de algo mucho peor que un simple "mal arranque de temporada".

En el Barça, Xavi Pascual tendrá que prescindir tanto de Brad Oleson como de Erazem Lorbek, que no viajarán a Bilbao. Por lo demás, los blaugranas llegarán a tierras vascas con toda la artillería, incluido Juan Carlos Navarro, que se perdió el partido de liga del año pasado.

El partido de los triples

La friolera de quince triples, fueron los recibidos por el Bilbao Basket en el último partido disputado. Cada partido, la defensa de la línea de bonificación se torna una tarea imposible para los hombres de Rafa Pueyo, que ceden y ceden puntos con los lanzamientos desde el triple. Sin duda, hoy no será su partido mas sencillo en ese aspecto.

Los Huertas, Hezonja, Lampe y Papanikolau, verdaderos expertos en el bombardeo desde el perímetro, se les suma el verdadero crack en el tiro de tres, como es Juan Carlos Navarro, que está a solo cinco triples de batir la marca de los 1.000 triples ACB. De momento, solo Alberto Herreros ha sido capaz de anotar mas triples que el escolta culé.

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Sobre el autor
Jon Álvaro Martín Álvarez
Fútbol, baloncesto y música. De la generación del 93.