El CAI Zaragoza ganó un encuentro muy díficil ante la dureza del equipo vasco. Rudez y Shermadini fueron los mejores del encuentro con una buena partipación en todas las facetas. El Bilbao recae al puesto 12 de la clasificación tras esta derrota.

Los dos equipos comenzaron jugando con paciencia desplazando el balón a la zona para sus pívots. En estos primeros minutos de juego, se impusieron las defensas ya que la anotación era bastante pobre. Pero, dos triples de Llompart y Rudez abrieron brecha en el marcador. La defensa maña apretaba y era tan férrea que causó muchos problemas al Bilbao. Se pudo ver reflejado en el tanteador al término del primer cuarto: 17-4 para los locales.

Intensidad defensiva

El CAI Zaragoza empezó también muy fuerte el segundo cuarto con un 8-0 de parcial de salida. Las canastas de Tabu y de Roll propiciaron esta ventaja en el marcador. Los vascos sólo encestaban con canastas aisladas de Grimau. Sin embargo, el base Raúl López animó a su equipo y redujeron la distancia hasta 8 puntos. La buena actuación de Mumbrú en el poste bajo obligó a Abós a sacar a Rudez para pararlo, ya que la defensa de Pere Tomàs era insuficiente. Al decanso, 37-31 para los maños.

En la segunda parte sobresalió el trabajo de Shermadini en la pintura cargando de faltas a los jugadores interiores del Bilbao. Junto con el georgiano, Rudez estaba siendo el mejor jugador del encuentro con una excelente participación. Los visitantes seguían moviendo el balón para que Mumbrú posteara debajo de canasta. La entrada al campo de Germán Gabriel revolucionó el partido con 7 puntos consecutivos de él. Tras acabar este tercer cuarto, el CAI Zaragoza seguía dominando con un 63-52 muy favorable.

Lucidez en ataque

El último cuarto fue espectacular con canastas estratosféricas. Los maños permanecían mejor en cancha con Shermadini puesto que era un buen referente en ataque. Los vascos subieron el nivel y la intensidad para intentar la remontada, aprovechando las ventajas de Grimau y Mumbrú. Un alley-hoop de Roll con Sanikidze sobresaltó al pabellón  y al público de sus asientos. El Bilbao no supo como manejar bien los últimos minutos del partido y esto le paso factura. El encuentro se rompió definitivamente con un triple de Llompart y un robo de balón de Sanikidze que acabó en canasta. El resultado final fue de 88-72 a favor de los locales.