El inicio del partido no era lo cómodo que hubiera deseado el CAI Zaragoza, y es que el control de los primeros minutos sería para el MoraBanc Andorra. Betinho Gomes copaba la mayor parte de los puntos visitantes, ante un CAI sorprendido por el alto ritmo de juego de los visitantes.  Rasko Katic se conectaba  a tiempo y mostraba sus credenciales en la pintura, frenando las opciones de sumar cómodos de los de Joan Peñarroya.

Chris Goulding aparecía para el CAI Zaragoza, y sumando desde lejos, reanimaba a los suyos.  Las rotaciones en el conjunto aragonés favorecían al juego rápido y serio que buscaba desde hacía algunos minutos. Leyendo las mejores opciones para sumar, los de Joaquín Ruiz mostraban su versión más sólida en ataque, frenando los ataques de MoraBanc Andorra. Con Pedro Llompart dirigiendo a la perfección a los suyos, el primer cuarto se cerraba con el 26-16 en el Príncipe Felipe.

Con el inicio del segundo período, aparecían los problemas en las filas de los andorranos: Georgios Bogris y Nathan Jawai se ponían con dos faltas personales cada uno, a lo que el CAI contestaba con un baloncesto rápido y efectivo. Joan Sastre, duro en los contraataques, finalizaba la transición con que ampliar diferencias en el marcador.

Henk Norel y Stevan Jelovac se convertían en una dupla perfecta para el CAI. Los dos interiores de los rojillos, intratables en la pintura, mostraban su versión más fiable, y obligaban a Peñarroya a dar entrada a Jawai para frenar las opciones de juego interior de los locales. Los argumentos para Andorra se reducían a los tiros de Gomes, pero la entrada del interior australiano daba algo de aire al ataque visitante.

Andorra aparece a tiempo

Marc Blanch y Betinho Gomes desatascaban a un MoraBanc Andorra que regresaba al Príncipe Felipe tras unos minutos en los que los errores propios habían frenado las opciones de reducir distancias. Los aragoneses, algo relajados tras su mejor baloncesto, estaban pagando cara su permisividad en defensa y veían cómo Andorra se acercaba hasta los 12 puntos. Un parcial de 0-8 rompía la barrera psicológica de los diez puntos, algo que servía a CAI para reaccionar antes del descanso.

Un dato daba fe de la poca dureza defensiva de CAI:  a tres minutos para acabar la primera mitad, los maños no habían cometido ninguna falta, y seguían permitiendo las opciones, cómodas, de MoraBanc Andorra. Jason Robinson reanimaba a los maños con un triple y volvía a sumar para los rojillos, poniendo el 43-33 en el pabellón zaragozano. Al descanso, el CAI mantendría la ventaja de diez puntos y se marchaba a los vestuarios con el 46-36.

La segunda mitad empezaba con dudas en las filas del CAI. Con jawai en pista, el conjunto de El Principado se sentía cómodo, y los ataques pasaban, en su gran parte, por las manos del australiano. Joaquín Ruiz decidía dar entrada a Norel para frenar al interior de los andorranos, y confiando en Llompart para mantener la ventaja, buscaba en la actuación del balear para encarar lo que restaba de tercer cuarto.

Norel, omnipresente

El pívot holandés se erigía en el referente caísta. Muy activo en ataque, castigando a un Bogris incapaz de frenar las acciones en el poste bajo de Norel, y vaciándose en defensa, el interior daba la confianza a su equipo, llevándose una sonora ovación de la Marea Roja. A dos minutos para acabar el tercer cuarto, Robinson establecía la máxima diferencia en el Príncipe Felipe, dejando el 62-47 en el electrónico. El CAI había sido capaz de frenar el buen hacer de Gomes, y noqueando a un MoraBanc Andorra que vivía de destellos individuales de Luka Bogdanovic, cerraba el tercer período con el 68 a 55.

Sastre abriría el último cuarto con una buena penetración, pero la respuesta rápida de Thomas Schreiner ponía el 70-60 en Zaragoza. Las dudas en las filas rojillas aparecían en el peor momento, y es que los propios errores devolvían a Andorra al partido. Buscando las segundas opciones, con Jawai como máximo estandarte, los andorranos se sentían más cómodos en la cancha, y tomaban la iniciativa del partido.

Sastre al rescate 

Era, otra vez, Sastre, el que devolvía la alegría al baloncesto zaragozano. Confiando en sus 1c1 y asistiendo a Norel en la pintura, ampliaba ventajas los 15 puntos.  El trío formado por el holandés, Sastre y Robinson mantenían la serenidad en Zaragoza, y sin perder los nervios, guiaban al CAI hacia el triunfo en casa. Lidiando con diferencias que bailaban entre los 11 y los 15 puntos, los maños evitaban las canastas cómodas de los andorranos, pero entraba en una dinámica negativa en ataque, sin anotar durante tres minutos.

Dos triples consecutivos de Bogdanovic añadían emoción a los instantes finales del encuentro, colocando a MoraBanc Andorra a cuatro puntos, con 21 segundos pos disputarse. Sin embargo, el CAI sentenciaba el partido desde los tiros libres y controlaba los últimos segundos para sentenciar el triunfo, con el 84-79 final.