Las finales siempre son especiales, se juegan muy pocas y solo si tienes suerte de estar en un equipo ganador. Mañana en la capital rusa de Moscú se vivirá el ambiente de una final excepto por la afición. Esta vez los seguidores no estarán repartidos, animarán todos al mismo equipo, el CSKA. Por lo demás, parece que ya estemos en Berlín, ciudad donde se decidirá quien es el nuevo campeón de esta Euroliga. Grandes jugadores en la pista, exitosos entrenadores en los banquillos y la necesidad de ganar para seguir la estela del Olympiacos Piraeus en este grupo F del Top 16

Ambos equipos llegan a este partido con un parcial de 1-1 y habiendo ganado su último partido de competición europea. Los locales vencieron en la pasada jornada a un Real Madrid que no está en su mejor momento y que está sufriendo la baja de una de sus estrellas, el alero Rudy Fernández. El conjunto de Xavi Pascual también cumplió y derrotó a un Khimki liderado por el ex NBA Alex Shved, que puede presumir de ser el jugador mejor pagado del continente.

El partido será más fácil para el Barça si consiguen frenar al mejor ataque de esta edición de la Euroliga. La defensa es clave para ganar el encuentro ya que promedian 91,3 puntos por partido. Nando de Colo es el mayor peligro que tienen los rusos, recién llegado esta temporada de la mejor liga del mundo. Primero siendo elegido en el número 53 de la 2ª ronda del Draft de 2009 por San Antonio Spurs y luego militando en las filas de los Toronto Raptors. El francés es el jugador que mejor valoración por partido tiene en la máxima competición europea.

Los jugadores del CSKA también deben estar atentos a un Ante Tomic que se encuentra en un estado de forma espectacular y que ha conseguido cifras dobles en anotación en los últimos nueve partidos de Euroliga con un 71,6% de tiros de campo. El croata se verá las caras con Andrey Vorontsevich que ha anotado al menos un triple en 12 de sus últimas 13 actuaciones. Juan Carlos Navarro y Pau Ribas intentarán hacer sufrir a la defensa rusa con sus tiros de tres mientras que Doellman, Shane Lawal y Samardo Samuels se pelearán en la pintura con Kyle Hines y Demetris Nichols.

Los catalanes no pueden olvidarse tampoco de otros grandes jugadores como Milos Teodosic, que lleva encestando al menos un triple en 35 de sus últimos 36 partidos de esta competición, o Corey Higgins que promedia un 54,5% desde más allá de la línea de 6,75. 

Este será un partido de reencuentros ya que Álex Abrines se volverá a encontrar con su excompañero en el Unicaja de Málaga, Joel Freeland. Stratos Perperoglou también coindirá con un viejo conocido como es el pívot Kyle Hines, con quien se proclamó campeón de Europa en 2009 siendo jugadores del Olympiacos.

Quien se haga con la victoria en este encuentro saldrá en una mejor posición en el grupo F lo que le permitirá jugar el resto de partidos con algo menos de presión, ya que el grupo se encuentra muy igualado. El Brose Basket Bamberg, el Laboral Kutxa, el Real Madrid , el Khimki y los dos equipos que se enfrentan este jueves están empatados con un parcial de una victoria por una derrota.

De esta manera, este partido tiene todos los alicientes para ser una verdadera final anticipada. Solo faltan las apuestas, las ruedas de prensa previas, que se llene el Megasport Arena, que salten los jugadores a la pista y que el árbitro lance el balón al aire.