El Real Madrid se tomó la revancha tras la derrota en la final de la Copa del Rey 2018 disputada la pasada semana en Gran Canaria y venció con mucha facilidad en Euroliga a domicilio al Barça Lassa por 74-101. Los pupilos de Pablo Laso firmaron un magnífico encuentro tanto en la pintura como en la larga distancia, además de hacer una buena defensa, y no dieron apenas opciones al equipo dirigido por Svetislav Pesic, que vio como sumaba su primera derrota desde que llegó a la Ciudad Condal.

Imperial inicio del Real Madrid

El Real Madrid fue un ciclón desde el salto inicial

El choque comenzó con un Real Madrid mucho más entonado que el FC Barcelona Lassa, especialmente desde la larga distancia, con un inspirado Jaycee Carroll, que fue una pesadilla para la defensa azulgrana. El equipo dirigido por Svetislav Pesic siguió sin reaccionar y el conjunto madridista lo aprovechó para irse rápidamente por más de diez puntos, utilizando mucho su juego interior con la potencia de Walter Tavares y la experiencia de Felipe Reyes. Thomas Heurtel anotó las dos primeras canastas del Barça, pero ni mucho menos significaron un giro radical de dinámica en el primer cuarto, pues el Madrid siguió anotando y se fue al final del mismo hasta los 30 puntos, dejando muy mermado al conjunto local (13-30).

En el segundo cuarto, el Barça Lassa mejoró notablemente pero se encontró ante un intercambio de canastas que, tras el primer periodo, lógicamente favorecía al equipo dirigido por Pablo Laso. Los puntos en la pintura de Ante Tomic y dos triples de Adrien Moerman hicieron enloquecer al Palau, pues los azulgranas llegaron a ponerse a diez puntos, pero el Madrid contrarrestó el parcial con dos buenas acciones de Anthony Randolph y un triple sobre la bocina de Facundo Campazzo para dejar la misma diferencia que en el primer cuarto con una diferencia de 17 puntos (35-52).

Sentencia por la vía rápida

El Barça no reaccionó y la victoria voló fácilmente hacia la capital

En la reanudación, el Barça comenzó anotando a base de tiros libres, pero al igual que en el periodo anterior, el Madrid logró girar la situación rápidamente gracias a tres triples consecutivos (Campazzo y dos de Carroll), que lograron poner la máxima en el luminoso del Palau Blaugrana (39-64). El equipo de Pesic, de nuevo, hizo un amago de intentar ir a por la remontada con otros dos triples de Juan Carlos Navarro y Petteri Koponen, pero, repitiéndose la misma historia de las contadas anteriormente, el Madrid volvió a responder con un parcial que esta vez ya dejaba el encuentro prácticamente visto para sentencia a cuatro minutos para finalizar el tercer cuarto (49-72). El equipo local, lejos de la reacción, vio como el Madrid siguió haciendo su partido y aumentando la distancia en el el marcador con una canasta inverosímil de Jonas Maciulis. Un triple sobre la bocina de Fabien Causeur cerró un tercer cuarto que dejaba totalmente finiquitado el partido a falta de diez minutos para la finalización del mismo (57-83).

Durante los últimos diez minutos de encuentro siguió el show del Real Madrid en Barcelona anotando canastas sencillas y con un Luka Doncic que, pese a estar muy fallón en el tiro, repartió varias asistencias que hicieron gustar mucho a sus compañeros. El Barça ni siquiera pudo maquillar el marcador ante un Madrid que disputó los últimos minutos de encuentro con mucha tranquilidad y sabiendo que la victoria ya estaba en su bolsillo desde hace rato. Un triple de Causeur hacía superar a los suyos los 100 puntos en el marcador y dejar el encuentro ya totalmente finiquitado, pues tras dicho triple no hubieron más jugadas (74-101).