Ya son quince las temporadas que han pasado desde que el Barcelona levantó su primera Euroliga. Era un equipo completo, estaban dirigidos por Svetislav Pesic y en pista estaba un base lituano llamado Saras Jasikevicius. Tras quince años y muchas vueltas, jugador y entrenador se reencuentran como entrenadores para que el alumno demuestre al maestro todo lo que ha aprendido.

El encuentro es un clásico europeo, los dos equipos tienen un largo recorrido en la competición pero la dinámica que están atravesando es totalmente opuesta. Unos llegan en uno de sus mejores años y los otros, pese a levantar recientemente un título, se presentan al partido en una de las peores campañas de la historia del club.

Sin embargo, y tal y como indicó Pesic, el club azulgrana se acoge a la filosofía del partido a partido para tratar de gestionar cada encuentro de la mejor forma. Este choque ante Zalgiris promete ser espectacular, con dos entrenadores similares y que han hecho, hacen y harán grandes cosas en el baloncesto.

Una final más

El cuádruple empate entre el cuarto y el séptimo obliga a los integrantes de ese pelotón a no fallar bajo ninguna circunstancia. Recibir al Barcelona siempre es peligroso, pero la llegada de Pesic da un plus a esa dificultad y Jasikevicius deberá gestionar el encuentro a la perfección para anotarse la victoria. 

Foto: Noelia Déniz
Foto: Noelia Déniz

Los interiores del conjunto lituano pueden tener la clave del partido, ya se vio a un Barcelona que sufrió en exceso ante los pivots del Real Madrid. Llegan tras derrotar de forma contundente a Efes y con el descanso de las Ventanas FIBA, han podido recuperar alguna de las bajas para que Jasikevicius se enfrente a su mentor.

Será un encuentro apasionante, los lituanos están jugando un gran baloncesto y el Barcelona parece haber mejorado tras la llegada de Pesic. El equipo de Kaunas parte como favorito para llevarse el encuentro, pero ya hemos visto que este Barcelona no es el mismo equipo de hace un mes.

Reivindicarse lejos del Palau

La Copa ha sido un éxito, pero podría quedarse en un oasis si el Barcelona no mantiene los buenos resultados de Gran Canaria. El equipo cayó de forma estrepitosa ante el Madrid, se notaron algunas bajas importantes y Pesic tiró de los menos habituales para afrontar el encuentro ante el Madrid. 

Para el partido de Kaunas el serbio ha recuperado a Oriola y Ribas, que llegan muy justos pero viajan con el equipo. Se quedará en tierra Sanders, aún con molestias, y el equipo azulgrana visitará el Zalgirio Arena en cuadro. Un reto complicado para un Pesic que se verá las caras con Jasikevicius, jugador al que entrenó hace ya muchos años y que ha decidido seguir los pasos del serbio en los banquillos.

Foto: Noelia Déniz
Foto: Noelia Déniz

Lejos del Palau solamente han logrado vencer al Khimki en un partido marcado por el bajo acierto del rival pero en que vimos un buen Barcelona. Será importante que, a diferencia del partido ante el Madrid, los catalanes no se encierren en el tiro de tres y busquen otras alternativas para tratar de lograr una victoria que diese moral a la plantilla.

Antecedentes

Zalgiris y Barcelona se han enfrentado en once ocasiones en Kaunas y el balance es bastante positivo para los azulgrana. Se han dado diez victorias catalanas por una única victoria lituana, curiosamente esta victoria llegó la temporada pasada en un encuentro tremendamente igualado y que se decidió en los últimos minutos del choque.

Se trata de un clásico europeo entre dos equipos que se han enfrentado en muchas ocasiones, pero siempre con un balance bastante favorable para el Barcelona Lassa. Está por ver si los lituanos repiten la victoria de la temporada pasada o los barceloneses se vengan tras la derrota encajada en la primera vuelta de la competición.