Royce Khalil O’Neale (Texas, Estados Unidos, 5 de junio de 1993) es una de las nuevas caras que han llegado este verano al Herbalife Gran Canaria con la difícil tarea de suplir las bajas de Brad Newley y DJ Seeley. El norteamericano llega procedente del MHP Riesen Ludwigsburg, que se enfrentó en la pasada campaña en Eurocup al conjunto canario con él en pista haciendo buenos partidos. Aunque todavía pocos conocen al alero de 1’98 metros, las expectativas son altas y la afición y el cuerpo técnico esperan que O’Neale pueda despuntar con los claretianos, como ya han hecho otros muchos en su misma situación antes que él.

Suplir a Brad Newley

A ningún jugador le gusta que, nada más llegar a su nuevo destino, le digan que tiene la dura labor de sustituir a un mito del equipo. Royce ha llegado este verano a la Isla con la misión de hacer olvidar a Brad Newley, que tras cinco años con la elástica amarilla decidió poner punto y final a su aventura canaria. Newley, con su carisma y su saber hacer, enamoró a la afición y fue un hombre fijo en los quintetos iniciales de los entrenadores que trabajaron con él en Gran Canaria.

El punto fuerte de O'Neale es su habilidad de marca, pero no destaca ofensivamente

O’Neale deberá, en esta su primera temporada de amarillo, cubrir esa sensible baja a base de buenos partidos, pero no solo en ataque, sino también defensivamente. Una de las grandes tareas del australiano durante su periplo en el Herbalife fue la de mantener la intensidad defensiva durante todo el partido, convirtiéndose en un verdadero quebradero de cabeza para los atacantes rivales. El recién llegado es, precisamente, un jugador que destaca por sus cualidades defensivas: su capacidad reboteadora es muy alta, promediando 4’7 rebotes por partido en su pasada temporada en el MHP Riesen Ludwigsburg alemán en los 29 encuentros que disputó. También destaca por su habilidad en el marcaje tanto sobre el balón como en la defensa sin balón, es un jugador que entiende su rol en las defensas.

Ofensivamente, sin embargo, no destaca. Es un jugador que, si bien tiene buenos porcentajes de tiro (durante su último año en la Universidad de Baylor estadounidense consiguió un 45,6% de acierto en tiros de dos y un 43,8% en tiros de tres), no suele intentar muchos lanzamientos. Solo intentaba tres triples cada 36 minutos de juego, seleccionando bien el momento y la técnica: a pie firme y generalmente abierto. Eso sí, los puntos fuertes del alero están en su juego en equipo ya que es un gran pasador, muy desprendido. Además, es ideal para situaciones de contragolpe, corte sin pelota o rebotes ofensivos merced a su gran potencia.

Temporada notable en su primera aventura europea

Royce O’Neale llegó al MHP Riesen Ludwigsburg alemán tras haberse graduado en la Universidad norteamericana de Baylor. Con los germanos jugó la liga bávara y competición europea, en donde se enfrentó al Herbalife Gran Canaria. Promedió 8,9 puntos, 4,7 rebotes y 1,2 asistencias por partido en los 29 encuentros que disputó entre competición doméstica y continental. Si bien no es un jugador que sobresalga en algún aspecto del juego, sí que es importante su aportación en diferentes facetas del juego, que le hacen ideal para el puesto en Gran Canaria.

Como ha pasado con otros jugadores como Alen Omic, Kevin Pangos o Edy Tavares, el Herbalife Gran Canaria recibe este año otro diamante por pulir. El cuerpo técnico encabezado por Luis Casimiro espera obtener provecho del alero norteamericano y de explotar su potencial para que el próximo verano sean equipos NBA los que pregunten por él. O’Neale también sabe que una buena temporada en Gran Canaria le puede catapultar al estrellato del baloncesto continental e, incluso, mundial. 

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Sobre el autor
Christian Afonso
Periodismo en la UC3M. Redactor en la sección del Herbalife Gran Canaria. Amante de la verdad y el criterio por encima de todas las ideologías. La radio como medio de vida