Buen partido del cuadro fuenlabreño pese al mal inicio. Los locales tuvieron que remontar casi veinte puntos de distancias al conjunto catalán, que empezó muy acertado desde la línea de tres puntos y dominando el encuentro. Poco a poco, la situación se fue revirtiendo hasta que los jugadores del Fuenla pusieron el partido “patas arriba” con una buena defensa y poderío bajo el aro, unido a un mayor acierto desde la línea de tres.

El técnico argentino de Montakit Fuenlabrada, Néstor García, se mostró feliz del resultado y del esfuerzo realizado por sus jugadores. “Es un partido que considero muy preciado para nosotros. […] Veníamos de un último juego en el que remontamos y al final perdimos, entonces el hecho de haber ganado hoy viniendo de atrás otra vez al equipo le viene bien para la autoestima”, aseguró.

Sobre clave de la remontada, Néstor lo tuvo siempre claro. “La ventaja que ellos llevaban era real por lo visto en el juego. Nosotros no estábamos jugando bien. […] Nos falta algo más de equilibrio, pero la clave estuvo en el momento de la reacción de Alex Llorca o Roland jugando por dentro”, afirmó.

Uno de los acontecimientos que más incógnitas levantó fue la lesión de Llorca, uno de los grandes artífices de la remontada. El jugador abandonó el encuentro tras un duro choque en un balón dividido, pero el alcance de la lesión siguió siendo desconocido al término del encuentro, incluso para el propio entrenador. “Está con hielo, le dolió mucho. Su actitud fue contagiosa para el equipo y ahí comenzó la remontada”, explicó.  Además, Néstor hizo una valoración general de su equipo tras estas once jornadas, viendo los puntos positivos y clave del trabajo y algún aspecto a mejorar. “Lo mejor que tienen estos jugadores es que compiten todo el tiempo durante la semana entrenando. Se llevan bien. […] En esta vida hay que mejorar todos los días. Tenemos que buscar algo más de regularidad en ataque”; finalizó.

La otra cara de la moneda fue Diego Ocampo, que explicó la derrota y la remontada del rival por la relajación de sus jugadores al verse tantos puntos por encima. Ese exceso de confianza fue lo que les costó el partido, según aseguró su técnico. “Estoy fastidiado, por no decir algo peor”, dijo.