Rudy nunca se da por vencido. Esa es una de las grandes consignas del mallorquín. Ya en su periplo en la NBA, (estuvo allí cuatro años entre Portland Trail Blazers y Denver Nuggets), sufrió dos lesiones muy fuertes de espalda. Se perdió un temporada entera y le frenó claramente la progresión en una liga con enorme carga de partidos y exigencia física.

Rudy acabó lesionado ante Lituania (Feb.es)
Rudy acabó lesionado ante Lituania (Feb.es)

En las cuatro temporadas completas que lleva en el Madrid estaba badeando bastante bien el problema. Bien es cierto que se había perdido varios partidos por lumbalgias, zona dolorida y precaución, pero no había tenido que volver a pasar por el quirófano. Este comienzo de temporada la espalda de Rudy dijo de nuevo basta. Muchos recuerdan el brutal bloqueo de Jankunas en la final del Eurobasket. El balear ya venía muy tocado (se perdió varios partidos del campeonato), pero lo dio todo hasta el final. Sin embargo, pasó inevitable factura al Madrid.

Un comienzo con dolor

Rudy es un luchador, y pese a quedarse literalmente tieso en la final del Eurobasket, tras levantar el trofeo se metió en un avión rumbo a Brasil. Allí se reunía con el resto de los miembros de la plantilla blanca para iniciar otra campaña sin descanso. Pese a que parecía muy poco probable, disputó minutos en el primer partido de la Copa Intercontinental frente al Bauru carioca. Pero avanzada la segunda parte las molestias eran insufribles y apenas podía doblar la espalda o tirar recto.

El segundo partido no lo jugó, aunque sus compañeros hicieron los deberes y se llevaron el trofeo. Ya se hablaba de la posibilidad de operarse de inmediato, pero Rudy no quería perderse tanto tiempo. Sabía que había que renovar títulos y no quería estar en el dique seco. Tuvo un tratamiento preventivo, con muchos estiramientos, fisio, descanso...Pero sin operarse. Se perdió la Supercopa de España, pero volvió demasiado pronto y disputó las primeras siete jornadas de Liga Endesa y todo el grupo inicial de Euroliga.

Rudy calentando en un encuentro (Noelia Déniz - VAVEL)
Rudy calentando en un encuentro (Noelia Déniz - VAVEL)

Pero Rudy estaba muy tocado. Vivía con el dolor y sus números estaban a un abismo de su calidad y capacidad. En Liga promediaba (6 puntos, 3,1 rebotes, 2,6 asistencias y 7,7 de valoración en 24 minutos de media), en Euroliga (10 puntos, 3,3 rebotes y 2,3 asistencias en 26,2 minutos). Precisamente en un partido contra el Estrella Roja de Belgrado, a los 11 minutos de encuentro su espalda dijo basta.

Más de tres meses fuera

El 3 de diciembre de 2016 el alero se operaba definitivamente de una hernia discal. La misma que ya había padecido en la NBA después del terrible golpazo que le dio Trevor Ariza allá por el año 2009. El periodo de recuperación estimado era entre dos y tres meses. Algunos decían que podría llegar para disputar la Copa del Rey 2016 que se jugaba en La Coruña del 18 al 21 de febrero, pero no fue así ni de largo. Como es natural, después de una operación tan delicada, y además en una zona que ya tenía seriamente tocada, se le tuvo entre algodones.

El balear apoyando al equipo tras la operación (ultimahora.es)
El balear apoyando al equipo tras la operación (ultimahora.es)

Sin Rudy, un Madrid que estaba sufriendo mucho el cansancio y la adaptación de los nuevos jugadores, se vino arriba en la Copa. Cuando pocos daban un duro por ellos, y guiados por Llull y Ayón, se llevaron el trofeo. Quizá esto también ayudó a que el jugador de Palma de Mallorca se lo tomara con mayor calma. Volvía definitivamente a mediados de marzo, casi tres meses y medio después de la operación.

Siguen los sustos

El 13 de marzo Rudy vuelve a las pistas. Apenas juega siete minutos, pero transmite buenas sensaciones y enchufa 3/3 en triples para ayudar al equipo a pasar por encima del Morabanc Andorra en Liga. Habían pasado 107 días y 30 partidos de ausencia del alero. Paulatinamente iba entrando más en las rotaciones. Desde luego siempre desde el banquillo, ya que Jonas Maciulis o un emergente Jeffery Taylor estaban cubriendo con oficio el puesto de alero. 

Se cayó en la eliminatoria de la Euroliga, pero no se puede achacar a que Rudy aún estuviera falto de ritmo (que también), sino a que simplemente el Fenerbahçe turco de Obradovic estaba como una moto y los blancos no aguantaban el ritmo de dos partidos exigentes por semana. El problema es que cuando los capitalinos ya se estaban centrando en revalidar el título de Liga y reajustando sus entrenamientos para retomar la forma, Rudy volvió a causar baja.

El mallorquín se resintió de sus problemas (kiaenzona.com)
El mallorquín se resintió de sus problemas (kiaenzona.com)

Saltaban de nuevo las alarmas el 11 de mayo, cuando en un partido contra el Fuenlabrada notó un pinchazo de nuevo en la espalda. No terminó el encuentro y dejó de entrenar con el grupo. Esta vez era una lumbalgia, pero la precaución era máxima. No terminó la regular, no jugó la eliminatoria de cuartos contra el UCAM Murcía, y se reincorporó entrada la serie semis frente al Valencia Basket. La cantidad de partidos que se había perdido esta temporada ascendía ya a 41. Pero el Rudy que volvió, estaba a tope.

Una gran final de Liga

Muchos no lo esperaban. Después de recaer parecía ilusorio contar con un Rudy decisivo para los partidos clave. Pero de nuevo el hombre que nunca se rinde volvió a la palestra. Contra el Valencia estuvo asesino desde la larga distancia (porcentajes cercanos al 63 % en triples), y les llegó a enchufar hasta seis misiles en un solo partido, Fue importante para dar refresco, calidad, defensa y puntos. La serie contra los taronja se ganó 3-1.

Celebrando el título con aficionados del Palacio (Realmadrid.com)
Celebrando el título con aficionados del Palacio (Realmadrid.com)

Llegaba la gran final contra el eterno rival el FC Barcelona Lassa, sin la ventaja de pista, perdiendo el primer encuentro en el último segundo. Pero nada impidió que el balear (como el resto de sus compañeros), se híper motivaran, dieran la vuelta a la tortilla y vencieran a los blaugranas robando un partido en el Palau y concatenando tres victorias seguidas. Rudy estuvo participativo en todas las facetas: siguió enchufando de tres, defendiendo, entrando a canasta como hacía meses que no se le veía.

Ahora le vuelve a tocar ir con la Selección, nunca dice que no a la Ñ. Servicios médicos, técnicos y compañeros de Rudy en el Madrid, esperan casi rezando, que este verano le sea menos agresivo y pueda volver a las filas madridistas de una pieza.

Nota de la temporada: 6.5