El Palacio de los Deportes tuvo un ambiente increible a la vez de tenso en un partido donde el equipo visitante le puso las cosas más complicadas de lo que se esperaba al Real Madrid.
Inicio inesperado
El Real Madrid salió a la cancha con cierta relajación, sobretodo en defensa, pero con la muñeca caliente. Hasta tres triples en los primeros minutos separaron a los blancos del equipo italiano, pero estos supieron reaccionar y llegaron a empatar de nuevo en el marcador del partido que, contra todo pronóstico, estuvo reñido hasta el final de los primeros minutos donde el Emporio Armani acabó ganando por tres puntos.
El segundo cuarto fue desastroso para el Real Madrid. Se relajó en defensa más de lo debido y los visitantes marcaron hasta 31 puntos en 10 minutos con Krunoslav Simon que con 20 puntos al final lideró al equipo. Por parte del conjunto de Pablo Laso, probaron suerte desde el perímetro y lanzaron a canasta hasta nueve veces pero el resultado no fué el mejor ya que fallaron más tiros de los que encestaron.
Tocaba remontar
Tras el regreso de los vestuarios en el tercer cuarto, el Palacio se volvió una olla a presión. El arbitro pitó ciertas jugadas en contra del conjunto merengue que alteró a los aficionados congregados en el WiZink Center; cada acción de los italianos era pitado y abucheado y el partido cada vez se complicaba más para los de Madrid, los triples no entraban, las jugadas no terminaban de salir bien y aunque jugadores como Sergio Llull o Luka Doncic estuvieran cumpliendo con su parte el resto del equipo estaba algo desaparecido. La afición local se volcó para apoyar a su equipo pero acabó por detrás en el marcador al terminar el tercer cuarto
El último y definitivo cuarto fue sin duda el más intenso de todo el encuentro. Los chicos de Pablo Laso iban por detrás en el marcador y se respiraba la tensión en el ambiente. Pero apareció al que todos estaban esperando, la estrella, Sergio Llull, al que además los arbitros le pitaron una técnica por echarse las manos a la cabeza tras una polémica jugada. El base se echó en un partido más el equipo a las espladas y consiguió remontar la diferencia a los cinco minutos de acabar el partido. Ambos conjuntos no querian perder el encuentro y así lo demostraron a lo largo de todo el partido, pero sobretodo los últimos minutos de encuentro.
Finalmente el partido se definió en los dos últimos minutos donde el entrenador Pablo Laso confió la situación a jugadores como Taylor o Nocioni que no habian jugado los últimos partidos por falta de minutos o por falta de juego. Luka Doncic sentenció el encuentro con un mate en contartaaque donde la afición local se desató.
El Real Madrid se lleva la victoria concluyendo de esta manera un mes de enero impecable exceptuando el primer partido del año contra el Baskonia. Los italianos demostraron una vez mas que no hay encuentro fácil en Euroliga.