El Real Madrid y el Unicaja de Málaga se han medido en un partido desequilibrado en el Wizink Center. El conjunto de Pablo Laso buscaba recuperar sensaciones y vaya si lo han hecho. Han superado al equipo malaguista en todos los aspectos del juego. Si jamás se ha dudado de la capacidad ofensiva de los actuales campeones de la Copa del Rey, hoy han demostrado que su defensa también puede ser la base de una gran victoria.

Gran defensa desde el salto inicial

La actitud defensiva del Real Madrid era completamente positiva. Solo la superioridad física de Brooks sobre Maciulis, que le defendió durante largos periodos de tiempo provocaba los puntos fáciles del equipo andaluz en el primer cuarto.

La solidaridad de todo el equipo madrileño, la energía de Campazzo, que aportó dos robos consecutivos mediado el tercer cuarto, y la intimidación debajo del aro de Tavares fueron clave. Solo la velocidad de Alberto Díaz el acierto de Milosavljevic evitaron una diferencia más abultada.

El parcial al final del primer cuarto fue de 19-12, al concluir la primera mitad ya era de 40-27. Tras un tercer cuarto en el que los merengues volvieron a destacar por su defensa—solo concedieron once puntos—el marcador ya reflejaba un 62-38. La defensa blanca desmoralizó en todos los niveles a los de Joan Plaza. La desesperación estaba presente en la cara y los gestos de los jugadores cajistas. Se fallaban hasta tiros sencillos desde media y larga distancia.

El ataque del Real Madrid funcionó bien a lo largo de tres cuartos. Llegado el último, ya con el partido completamente roto, Jaycee Carroll recordó que sigue siendo posiblemente el mejor triplista de Europa anotando cuatro lanzamientos de tres. Walter Tavares se encuentra más cómodo dentro del sistema y fue capaz de sumar ocho rebotes y ocho puntos. Sin embargo, la nota negativa fue su expulsión al llegar a las cinco faltas personales.

De todas maneras, Luka Doncic volvió a ser el más destacado de una noche en la que recibió el Premio a MVP del mes de octubre. El esloveno tuvo 28 de valoración gracias a sus trece puntos, diez rebotes y seis asistencias. El máximo anotador del Real Madrid fue Carroll con 17 puntos. Rudy Fernández sigue mostrando que necesitaba un descanso en verano y mejora cada vez más sus números. El Wizink Center le aplaudió como no lo hacía en años. El otro vitoreado de la noche fue el técnico vitoriano que agradeció en rueda de prensa el cariño recibido ya que “esos aplausos no son solo para mi sino también para todo el equipo”. Milosavljevic y Alberto Díaz fueron los que más productivos en el cuadro de Joan Plaza con diez.

Tras una victoria que Pablo Laso considera “muy importante”, su equipo se enfrentará al Betis mientras que el Unicaja que tiene que “relativizar” los últimos resultados negativos jugará en Andorra. El calendario apretado de los dos no ha ayudado a ver mucho acierto en el tiro exterior, salvo la racha final de Carroll. 

Las lesiones están siendo un factor común como han señalado los preparadores en rueda de prensa, aunque el técnico barcelonés no quería recrearse en sus quejas por haber perdido y no querer quedar como un “llorón”. Laso espera que Randolph esté de vuelta en un mes más o menos, a la vez que resalta la importancia de que Ayón y Llull se reincorporen satisfactoriamente a los esquemas cuando se recuperen de sus dolencias de larga duración.

Laso prometió dar nuevas oportunidades a Radoncic en el futuro porque en los partidos en los que ha tenido minutos ha tenido actuaciones más que sólidas. Al final del día, la lesión de Nemanja Nedovic pesó mucho más en el devenir del partido que las ausencias madridistas.