Se esperaba un gran partido en el Palacio de los Deportes José María Martín Carpena. Unicaja Málaga y Valencia Basket, dos plantillas amplias que llegaban en buena dinámica de resultados y en niveles parecidos de cansancio. Y el encuentro no defraudó a los aficionados, con dos equipos muy igualados y ofreciendo espectáculo con acciones espectaculares en ambos lados de la cancha. Pero el baloncesto no permite los empates, y en las arenas movedizas del último cuarto se manejó mejor el cuadro taronja, que, bajo la dirección de Antoine Diot y mostrando un buen nivel defensivo, acabó decantando el triunfo de su lado, lo que le permite afianzarse en la cuarta posición de la clasificación de la Liga Endesa.

El primer foco de atención se esperaba para minutos antes del encuentro, con la presentación de Will Thomas. El ala-pívot norteamericano cambió Málaga por Valencia tras ser el mejor jugador de los andaluces las dos últimas temporadas. Contrario a lo que pudiera esperarse, la afición malagueño recibió con una sonora pitada al estadounidense, que también contribuyó al aumento de los decibelios con un decepcionante partido. Thomas regresaba a la capital de la Costa del Sol tras protagonizar dos doble-doble consecutivos, pero ante su ex-equipo firmó dos puntos (dos tiros libres al final del encuentro) y cinco rebotes, teniendo un impacto mínimo en el juego.

Máxima igualdad

Una vez que el balón se elevó al aire impulsado por el árbitro, los dos equipos comenzaron un interesante intercambio de golpes, con los locales casi siempre por delante en el marcador. Los exteriores del conjunto de Joan Plaza asumían el protagonismo ofensivo en los primeros minutos, mientras que los valencianos alternaban juego interior y exterior para hacer daño a la defensa andaluza. Así, las alternancias en el marcador se sucedieron durante el primer tramo del encuentro, con protagonismo para el lanzamiento exterior. San Emeterio y, sobre todo, Rafa Martínez se transformaron en las armas ejecutoras del conjunto naranja, que consiguió su primera ventaja 'importante' con el 10-14 tras el segundo triple en dos intentos del escolta de Sampedor.

Un parcial de 8-0 para las hombres entrenados por Joan Plaza, con triples de Waczynski y Carlos Suárez, devolvieron la iniciativa en el marcador a los malagueños y obligó a Pedro Martínez a solicitar tiempo muerto a falta de dos minutos para el final del primer cuarto. Los valencianos salieron con gran acierto y encadenaron un parcial de 0-10 (con otros dos triples de Rafa Martínez) que permitió a los visitantes establecer en el marcador el 18-24 con el que se llegó al final de los primeros diez minutos.

Rafa Martínez firmó un 6/6 en triples en los primeros 20 minutos

El segundo cuarto tuvo color verde. Kyle Fogg salió desde el banquillo para agitar el encuentro y lo consiguió, encadenando prácticamente ocho puntos consecutivos para volver a equilibrar el encuentro. También contribuyó la intimidación de N'Diaye y el acierto de Jeff Brooks, que firmó su mejor partido con la camiseta de Unicaja Málaga. Cuando más problemas parecía tener en ataque Valencia Basket, volvió a aparecer Rafa Martínez para anotar dos triples consecutivos (6/6 en la primera parte) y colocar a los visitantes con una ventaja de cinco puntos (24-29). 

Unicaja necesitaba encontrar alguna referencia en la pintura y apareció Dejan Musli para imponerse en su duelo particular a Kravtsov y volver a igualar el partido. Cuando expiraba el segundo cuarto, una canasta de Adam Waczynski permitió a los malagueños marcharse al descanso con ventaja (42-40) tras una primera parte equilibrada y en la que habían estado por detrás en el marcador durante buena parte de la misma.

Al son de Diot

Tras el paso por los vestuarios, la igualdad se mantuvo en su nivel más alto. Los norteamericanos de Unicaja asumieron el protagonismo en ataque, mientras que del cuadro taronja San Emeterio asumió galones tras una mala primera mitad. Las canastas se sucedieron para uno y otro equipo y ninguno consiguió ventajas amplias, lo que mantenía el nivel máximo de tensión entre todos los jugadores. Cuatro puntos consecutivos de Nedovic, que reaparecía en la competición liguera, estableció el +6 para los andaluces, pero dos triples finales de los naranjas llevó el 62-61 al electrónico del pabellón malagueño.

Musli volvió a ser el mejor de Unicaja con 18 puntos y 25 de valoración

Los últimos diez minutos comenzaron con protagonistas inesperados. Joan Sastre asumió el protagonismo en el ataque valenciano, encontrando respuesta en el otro lado de la cancha por medio de Jeff Brooks, que durante varios minutos fue la única nota positiva de Unicaja y el único capaz de mantener a los malagueños en el encuentro. El acierto del norteamericano y el español provocaron que el partido continuase equilibrado, llegando a ser el resultado de 70 iguales a menos de seis minutos para el final. 

Pero la igualdad no duró demasiado, pues si bien los guarismos eran similares, la sensación sobre la cancha era que Valencia Basket se encontraba ligeramente por encima de su rival. Antoine Diot comenzó a dirigir a la perfección a su equipo y las canastas visitantes comenzaron a sucederse, mientras que fue Dejan Musli quien intentaba mantener a su equipo en el partido. El serbio fue el mejor de los suyos, pero el base francés y Rafa Martínez evitaron que se completara la remontada y cerraron un partido cuyo resultado fue más abultado por los tiros libres en los últimos segundos (83-91).