La mañana de domingo empezaba en la Fonteta con dos equipos que entraban desenchufados al partido. Unos primeros ataques donde la espesez en ataque vaticinaba un partido que nunca se dio, ya que Valencia Basket, con la intensidad como receta, iba a llegar al descanso con el partido sentenciado. El fantasma de los rebotes volvía a la Fonteta en el primer cuarto, y cuatro puntos consecutivos de Shengeila provocaron un tiempo muerto que pidió Perasovic a falta de 2:36 para el final.

Los buenos minutos de Sato, figura que iba a ser la más destacada por parte de los locales, empezaban en este momento. Un par de triples anotados por el propio Sato y Lucic abrían una pequeña renta de alrededor de 6 puntos que Valencia Basket no iba a dejar escapar. El cuarto acababa con una canasta sobre la bocina de Harangody que ponía el 22-17.

El partido acabó en el segundo cuarto

Tras la canasta local que cerraba el primero, la racha de Valencia Basket no hacía sino aumentar hasta el punto de acabar el cuarto con un parcial de 30-10. Un triple de Harangody, que junto a los antes nombrados Sato y Lucic se iba a convertir en nombre propio del partido, ponía ocho puntos de diferencia, máxima renta local hasta el momento. En estos primeros minutos de segundo cuarto Valencia Basket ponía la directa, con un Romain Sato que se rencontraba con sensaciones que recordaban a las de la pasada campaña, y anotando dos triples que sentaron a Baskonia como una jarra de agua fría. El centroafricano ponía el 38-21 cuando todavía quedaban minutos para llegar al descanso, y Valencia Basket iba a seguir aprovechando esta crisis visitante.

Laboral Kutxa ya había llegado a las 12 pérdidas antes de llegar al ecuador del partido, una estadística que va en consonancia con las sensaciones de un equipo que en ningún momento demostró estar metido en el partido. Fabien Causeur, con nueve de valoración y tan solo cuatro puntos, era el jugador más destacado de su equipo al final de los primeros 20 minutos.

La renta se iba ampliando a medida que pasaban los ataques: Nedovic ponía la máxima diferencia del partido en 21 puntos, y Loncar subía a 23 la renta para finalmente llegar al descanso con 25 puntos de margen para los locales. Con un 100% en tiros de campo, Harangody se destapaba como el mejor jugador del segundo cuarto, liderando a un equipo que llegaba al descanso con una valoración total de 75, que llama la atención en comparación con la del Baskonia. El equipo vasco llegaba al vestuario con una valoración total de 18, superando solo por tres la conseguida por Harangody hasta ese momento.

Con el partido más que finiquitado al final de la primera parte, los segundos 20 minutos bajaron en intensidad. Valencia Basket se limitaba a defender una renta que durante todo el cuarto supo mantener sin que bajara de los 20 puntos. Un colchón que causaba no la relajación, pero si una confianza que Perasovic aplacó rápidamente parando el partido cuando veía que el equipo bajaba en su actitud, en su duende. Baskonia no le metió el miedo en el cuerpo a los locales en ningún momento, y el tercer cuarto supuso la confirmación de que el partido ya había finalizado en el túnel de vestuarios. Harangody, Sato y Loncar siguieron redondeando estadísticas, y el alero africano llegaba al último cuarto con 14 puntos en su casillero, y dejando unas sensaciones esperanzadoras para la afición valenciana. El último cuarto prácticamente se quedaba en un trámite, y Baskonia se lo acabó llevando con un parcial de 18-25. Un maquillaje que vino acompañado de piques entre jugadores de ambos equipos, parecía que la falta de intensidad en el juego se contrarrestaba con estos encontronazos.

Al final, una diferencia de 15 puntos, en un partido que el Valencia Basket supo dominar y no vio peligrar en ningún momento. Los de Perasovic no realizaron un partido redondo, pero con la intensidad y defensa como principales armas, sumadas a la inspiración de jugadores como Sato y Loncar, y con una buena dirección de Guillem Vives fueron suficiente para olvidar y superar la derrota del pasado viernes ante Estrella Roja, que reduce las posibilidades del equipo en Euroliga.

Bertans y Causeur, con 12 y 14 de valoración respectivamente, fueron los mejores en un Laboral Kutxa que se va de la Fonteta con muy malas sensaciones. Por parte de los locales, la victoria se suma a la de la pasada semana en Andorra, y le devuelve el aliento a un equipo que quiere apurar sus opciones de no caer eliminado en Euroliga.

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Sobre el autor
Sergio Zarco
Periodismo En la Universidad Jaime I de Castellón