Afirma un viejo dicho que "Quien mucho abarca, poco aprieta". Y es que esta temporada muchos de los equipos nacionales que disputan a su vez competición continental, están sufriendo en sus carnes la complejidad de disputar ambos retos con garantías y en plenitud de condiciones. Porque la Liga Endesa es probablemente la competición nacional más exigente en Europa, y la acumulación de minutos y partidos al 100% de exigencia acaba pasando factura… y en este caso también fracturas.

Proyecto ilusionante

Tras el añorado campeonato liguero conseguido por los taronjas la pasada temporada, el club valenciano se puso manos a la obra para diseñar un bloque que pudiese afrontar la Euroliga disputándola de tú a tú con los grandes clubes europeos. Txus Vidorreta llegaba para sustituir a Pedro Martínez en el banquillo, y se mantenía la mayor parte del roster exterior incorporando a Erick Green y Alberto Abalde (tras un año cedido en Badalona). La pintura se reforzaba con Doornekamp, Latavious Williams y Tibor Pleiss tras la marcha de Oriola y Sikma.

Los problemas físicos de Diot hacían que Sam Van Rossom volviese al equipo sin haber comenzado la temporada. Hace apenas un par de jornadas llegaba además un ex-NBA como Damjan Rudez para reforzar la posición de 3 ante las lesiones de Fernando San Emeterio y Joan Sastre. Y es que tan solo 6 jugadores han competido en los 19 encuentros disputados hasta la fecha por los che (Green, Doornekamp, Pleiss, Vives, Van Rossom y Thomas).

Espiral de derrotas

La liga doméstica es por el momento la única de las alegrías que disfruta Valencia Basket. Con un balance de 7-2, ocupa la tercera plaza a una sola victoria del liderato. Sin embargo, la pasada jornada sufrió una dolorosa derrota en el Palau ante el FC Barcelona (la segunda consecutiva ante los de Sito Alonso tras la sufrida en Euroliga esa misma semana). Y precisamente es en Europa donde los de Txus Vidorreta no consiguen enderezar el rumbo. Tras la derrota de esta semana en casa ante Olympiacos, acumulan ya 6 derrotas consecutivas y necesitan un rápido golpe de timón que devuelva la confianza al vestuario.

Sin embargo el parte de lesionados no deja de aumentar. A los Dubljevic, Abalde, Diot y Williams se suma esta semana Joan Sastre, que con una  fractura en un hueso de la muñeca es posible que no reaparezca hasta el próximo año. La afición valenciana será sin duda un factor determinante este domingo para “activar” a los suyos de nuevo.

Un Andorra en notable ascensión

Tampoco los de Joan Peñarroya andan finos en Eurocup este año. Encuadrados en el grupo A, sólo han conseguido una victoria en 6 encuentros (ante Levallois en la 4ª jornada) y tienen complicado meterse entre los cuatro primeros para disputar el Top16. Sin embargo 3 de los cuatro encuentros que les quedan en esta primera fase son en El Principado… no hay nada decidido.

Sin embargo, los andorranos llegan a levante con buenas sensaciones en ACB tras tres victorias en cuatros partidos (las conseguidas ante Tenerife, Betis y Unicaja) y una derrota tras dos prórrogas en Badalona. La llegada de Chris Copeland para reforzar el puesto de 3-4 descarga de responsabilidades a Blazic, Walker y Fernández, encontrando una alternativa fiable tanto en la pintura como desde el 6.75 que además apoya el rebote y asiste con eficacia.

Jaime Fernández ante Montenegro / Foto: FIBA
Jaime Fernández ante Montenegro / Foto: FIBA

Por cierto que el base madrileño es otra de las buenas noticias para los suyos, dado que el gran momento de juego que disfruta le ha llevado a la internacionalidad absoluta en la  reciente convocatoria de Sergio Scariolo, y siendo pieza clave para la consecución de las dos victorias ante Montenegro y Eslovenia.

Pero no todo son buenas noticias para los de Peñarroya, y es que la enfermería se encuentra también casi al completo con Jankovic, Burjanadze, Shurna y Diagne.

Duelo de anotadores

Erick Green será clave el Domingo / Foto: Valencia Basket
Erick Green será clave el Domingo / Foto: Valencia Basket

Dos de los mejores anotadores de la competición se medirán el domingo. Erik Green es el máximo realizador con 18.7 puntos por encuentro, mientras Blazic es el quinto con 16.4. Los problemas físicos y las bajas que arrastran sus equipos les obligan a asumir mayor responsabilidad en el juego. Qué duda cabe que ambos serán piezas clave en el devenir del partido y en el futuro inmediato de ambos conjuntos, más teniendo en cuenta que en el mes de Diciembre Valencia ha de disputar 10 encuentros y Andorra 9… Que la fuerza les acompañe.