Hay un adjetivo que describe a la perfección el estado de Jamal Crawford en estos primeros días de agencia libre: codiciado. El escolta ha suscitado el interés de multitud de equipos en busca de un elemento que le de un empuje a su segunda unidad, y pocas opciones parecen más seguras que J-Crossover.
No han sido pocos sus pretendientes. Cavaliers y 76ers buscaban su llegada con objetivos distintos. Los actuales campeones consideraban un anotador de su calibre de cara al banquillo, pero el interés no llegó a hacerse material. Colangelo, por su parte, quiere abandonar la disciplina del 'tanking' y un veterano que haga de maestro a la joven plantilla de Philadelphia y aporte una buena dosis de anotación era un target a tener muy en cuenta.
Diversas fuentes afirmaban que la oferta de los Sixers era muy suculenta en lo que a dinero se refiere, y el propio Crawford afirmó hace unas semanas que no le importaría ocupar un rol de veterano en un equipo joven, pero se presume que habrá preferido la opción de, con cierta seguridad, poder seguir en Playoffs por lo menos el año que viene.
La nostalgia siempre rodea a los agentes libres. Los fans de las diversas franquicias suelen ver con buenos ojos los regresos de ídolos de otras épocas, y es por eso que Knicks y Warriors también sonaron con fuerza para hacerse con Crawford. Sin duda, hubiese sido un fichaje más que interesante para cualquiera de los dos conjuntos, pero finalmente no ha podido ser así.
Según ESPN, Jamal Crawford ha llegado a un acuerdo para seguir tres años más en los Clippers a razón de 42 millones de dólares, 14 por temporada. A sus 36 años, lo mejor para él era no arriesgar, dado que parece que la franquicia californiana tiene activos para aspirar a cotas altas de cara a estas próximas temporadas, y su rol hasta ahora ha sido un matrimonio perfecto entre él y los Clippers. Steve Ballmer seguirá disfrutando de unas de las mejores skills de la competición en su equipo.