Los Juegos Olímpicos son un gran escaparate para cualquier deportista, especialmente en el baloncesto. Competir con selecciones de altísimo nivel y hacer buenos partidos hace que llames a las puertas de algunos equipos de la NBA, y esto es lo que le ha sucedido al jugador asiático Yi Jianlian.

El jugador chino sería tercer mejor jugador en anotación de la cita olímpica, aunque desafortunadamente para China no conseguirían pasar de grupos, promediando más de 20 puntos y capturarando 6.6 rebotes en los encuentros que disputaría con su país en el Grupo A y que enfrentaría a Serbia, Estados Unidos, Australia, Francia y Venezuela.

Tras su periplo de cuatro años fuera de la NBA, el jugador que militó en Milwaukee Bucks (equipo que lo drafteó), New Jersey Nets, Washington Wizards y Dallas Mavericks regresa a la mejor liga del mundo de la mano de Los Angeles Lakers. Así lo confirmaría Mitch Kupchak, el general manager del equipo: "Estamos emocionados de tener un jugador con sus logros mundiales, esperamos traerle a nuestro campo de entrenamiento y que cause impacto en nuestro equipo".

El contrato del jugador es una incógnita, no se han desvelado de forma oficial los detalles, aunque periodistas como Brad Turner de LA Times, afirma que se le pagaría un salario fijo de 1,1 millones de dólares, mínimo de veterano, y que podría llegar a los ocho si se consiguiesen los bonus establecidos.

A sus 28 años y después de haber ganado todo en China, el nuevo jugador de los Lakers tiene una oportunidad muy grande para triunfar en la NBA la temporada que viene. Pudiendo jugar de tres o de cuatro, el jugador Yi Jianlian será otro veterano con experiencia para ayudar a Ingram o Randle la temporada que viene para que sigan formándose.

Se oficializa el contrato de Ingram

Los Lakers anunciarían hace unas horas la rúbrica del contrato con el número dos del Draft Brandom Ingram. Será un contrato de cuatro años en el que los dos primeros tendrá garantizados 10,8 millones y en los dos siguientes será el equipo quien decida si Ingram debe continuar, o no, en la franquicia de oro y púrpura.