Kevin Durant está teniendo un verano ajetreado. Después de la gran decisión de cambiar sus Thunder de (casi) siempre y fichar por los Warriors, unos Juegos Olímpicos donde él ha sido el líder del conjunto nacional de Estados Unidos hacia la medalla de oro en Río de Janeiro. Pero, tras este último acontecimiento, Durantula afronta con otra cara el comienzo de la pretemporada.
Sobre los Juegos de este año, donde ha logrado su segunda medalla de oro olímpica en representación de su país, Durant afirma categóricamente que estos han supuesto "una terapia tras un gran cambio en mi vida": "Ha hecho mi vida más fácil. Sabía las reacciones que iba a recibir, pero venir aquí y estar en un ambiente en el que la gente me acepta y sólo se preocupan de que estemos bien es justo lo que necesitaba", afirma el alero.
Su llegada al Bay Area ha sido el movimiento más sorprendente del período de agentes libres. Le han llovido críticas por todos los lados tras dejar Oklahoma City Thunder. Durant ha sido consecuente y no se arrepiente de ello. Y, al igual que las anteriores declaraciones, desveló a The Vertical quién ha sido de sus apoyos tras acometer tal salida de OKC: "Monty Williams me lo solía decir día tras día: no puedo dejar que nadie me robe la alegría", admite.
Durant ha coincidido en el equipo de USA Basketball que montó Mike Krzyzewski para los Juegos de 2016 con Draymond Green y Klay Thompson, dos de los compañeros que le acompañarán en Golden State Warriors la próxima temporada. Y, tras el oro, se ha ido de vacaciones a Mykonos con DeAndre Jordan, lo que demuestra aún más lo importante que ha sido este evento para su confianza y para intentar asaltar el Anillo 2017 con la mirada en el objetivo.