Ricky Rubio habló en el Media Day de los Wolves sobre las expectativas del equipo esta temporada. La era post Garnett deja al base español como el jugador de la plantilla que más veces se ha enfundado la casaca de los lobos, 278 partidos.

Tras un lustro en la mejor liga del mundo, Rubio quiere dejar de perder y conseguir por primera vez los objetivos marcados al inicio de temporada. Así lo reflejó en sus declaraciones al Minneapolis Star-Tribune: "La próxima temporada será crucial para mí. Llevo cinco años en la NBA y seis seguidos sin alcanzar la postemporada serían demasiado tiempo. Con 26 años, tendría que empezar a pensar en esos equipos que consiguen entrar en Playoffs y luchar en ellos".

Ahora es él junto a los ganadores del Eddie Gottlieb de los dos últimos años, Karl-Anthony Towns,  y Andrew Wiggins, quienes liderarán una manada plagada de jóvenes talentos. “Somos jóvenes, pero realmente pienso, en cuanto a talento, que es el mejor grupo en el que he estado” afirmó el catalán.

Rubio, Wiggins y Towns en un partido con Minnesota | Getty Images
Rubio, Wiggins y Towns en un partido con Minnesota | Getty Images

En las declaraciones Ricky quiso dejar claro que sus palabras al inicio del verano sobre la intención de ganar en la NBA no eran, en absoluto, una petición de traspaso. “No dije que quisiera ser traspasado. Quiero jugar en un equipo ganador y creo que tenemos la mentalidad necesaria para ello. Veo que estamos trabajando duro. Veo que estamos alcanzando un buen nivel para conseguir finalmente nuestro objetivo, que es llegar a los Playoffs”.

Esta obsesión por hacer bien las cosas esta temporada no solo está en la mente de Rubio. Towns, que este año afronta su segundo año, tiene la intención de conseguir algo especial esta temporada, refiriéndose a competir en la postemporada.

En el último Draft los Wolves eligieron a Kris Dunn, una promesa del baloncesto estadounidense, que competirá por Rubio para copar el puesto de base titular de la franquicia de Minneapolis. Rubio dijo para la página oficial de la NBA que espera poder compartir minutos con el roockie y poder ser su mentor. Otra de las claves para el cambio de resultados puede ser el aterrizaje de Tom Thibodeau al banquillo. El ex entrenador de Chicago y de Boston seguro que impondrá más orden y defensa que Sam Mitchell la temporada pasada.

El internacional español, bronce en los pasados Juegos Olímpicos, trabaja para mejorar su faceta de anotación, como lleva haciendo los últimos dos veranos. En su carrera en la NBA lleva 10.1 puntos por partido, 8.3 asistencias y 2.2 robos. Su tiro debe mejorar (36 por ciento en tiros de campo) para poder sumar más al equipo de lo que ya hace. Tendremos la oportunidad de ver el 8 de octubre, en su primer partido de preparación, a unos Minnesota Timberwolves que contagian su ilusión.