Lo que parecía una sesión de entrenamiento normal y corriente para los Spurs, se convirtió en un gran acontecimiento gracias a la aparición de la leyenda Tim Duncan. El mejor jugador de la historia de la franquicia volvió a aparecer después de que no se le viera desde su último partido como profesional, en los playoffs contra Oklahoma City Thunder, donde cayeron eliminados.

Los reporteros que observaron el entrenamiento intentaron averiguar que función estaba desempeñando el legendario ala-pívot. Sim embargo, Duncan se limitó a charlar con sus compañeros y dar la bienvenida a los nuevos jugadores, entre ellos a Pau Gasol. También se dedicó a jugar un poco al deporte que tantos años ha dominado.

Tras terminar el entrenamiento, nadie quiso desvelar cuál es el rol que tiene el jugador nacido en las Islas Vírgenes. Gregg Popovich, fiel a su estilo, bromeó con la situación afirmando que “será el entrenador de lo que quiera ser”.

El que sí que hablo con más seriedad sobre el rol de Duncan fue el General Manager de la franquicia tejana, R.C. Buford. “Creo que está aprendiendo a cómo es la vida tras haber jugado. Tiene que averiguar cómo quiere encajar, y a partir de ahí decidiremos que hacer”.

Parece que San Antonio Spurs quiere aprovechar desde el primer minuto toda la sabiduría de su histórico jugador para ayudar a los jugadores que ahora forman el roster del equipo. Los directivos estarían encantados de que Tim Duncan formará parte del staff de Popovich, pero habrá que ver si el futuro Hall Of Fame está dispuesto a seguir con esa vida de viajes y partidos cada 3 días, aunque sea desde el banquillo y con traje.

Después de 20 años habiendo estado al máximo nivel, no es descabellado pensar que uno de los mejores “4” de la historia quiera estar un par de años descansando y disfrutando de su familia. Bien merecido tiene dicho descanso.