El joven escolta de los Denver Nuggets, el cual solamente ha podido disputar cinco partidos de los que llevamos de temporada regular por diversos problemas como lesiones, sufrió en el pie una lesión el pasado mes cuando se enfrentaban a Detroit Pistons en el Palace of Auburn Hills, donde disputó 28 minutos anotando 13 puntos, pero su pie fue a peor a lo largo del partido y tuvo que abandonar la cancha antes de que acabara el encuentro dejando al equipo a la deriva, el cual no pudo hacer nada contra los de Detroit perdiendo por 17 puntos.

Michael Malone, entrenador de los de Colorado, espera que Gary Harris pueda regresar al parqué la próxima semana para ayudar al equipo, el cual no esta pasando por su mejor momento. Los de Denver comenzaron con buen pie ganando sus primeros partidos en casa, pero cada vez han ido a peor llegando a perder seis de sus últimos ocho partidos que han disputado teniendo un parcial de ocho victorias y 15 derrotas. Uno de sus compañeros de equipo, Emmanuel Mudiay, declaró que era fundamental y el equipo lo necesitaba; “Ustedes no lo comprenderían. Este hombre hace mi vida mucho más fácil”, señala el base de los Nuggets. Harris fue un pilar para el equipo la pasada campaña y es sin duda el mejor defensor exterior del equipo y el encargado de defender a anotadores tan implacables como James Harden o Russel Westbrook, muchas veces con éxito.

Pese que a las estadisticas del joven escolta no sean de las mejores debido a todos los problemas que ha ido teniendo a lo largo de la temporada, es uno de los jugadores con mayor proyección en la liga y que esta deseando volver para demostar lo que puede lograr y remontar un equipo que no consigue levantar cabeza.