Golden State Warriors y Houston Rockets volvían a verse las caras por segunda vez esta temporada. Esta vez el duelo se libraba en Texas dónde los Warriors buscarían revancha tras la victoria de los chicos de Mike D’Antoni en el norte de California en un partido agónico tras dos prórrogas.

Por su parte, Houston tenía muchas ganas de conseguir la victoria tras haber sido eliminados por ellos en los Playoffs las últimas temporadas; en 2015 en Finales de Conferencia y en 2016 la derrota llegó en primera ronda. Duelo entre James Harden y Stephen Curry, la pareja que formará el backcourt en el próximo All-Star Game que se celebrará en la ciudad de New Orleans

La dictadura del triple

Si por algo se conoce a ambos equipos es por su increíble dependencia del tiro exterior; esta vez no iba a ser menos. Ambos equipos se tiraron todos los tiros habidos y por haber, pero no acabó siendo una buena idea. El intentar tantos triples, acabó siendo la sentencia de muerte de unos Rockets que, no estuvieron muy acertados con un 20 por ciento de acierto en tiros de tres, siete anotados por 35 intentados. 

Metiendo marcha

Golden State Warriors ha vuelto a demostrar que son un equipo infalible al volver del descanso. Una vez más, el equipo de Steve Kerr, se iba al final de la primera mitad con un partido en el que no conseguían despegarse del marcador, 57-62. Fue comenzar el tercer cuarto, y la maquinaria de Golden State comenzó a funcionar. 37 puntos consiguieron anotar para marcharse a los últimos 12 minutos del partido con una cómoda ventaja. Kevin Durant, de nuevo, fue el jugador más destacado del partido. 32 puntos, siete rebotes, cuatro asistencias, dos robos y dos tapones. El alero de los Warriors, volvió a ser letal para su equipo entregando una victoria muy importante. Stephen Curry, tampoco se quedó lejos, 24 puntos para él. El base procedente de la universidad de Davidson, de nuevo, se mostró muy agresivo con constantes penetraciones a canasta y consiguió dar el máximo para su equipo. Zaza Pachulia dejó su huella en el partido; 10 puntos, nueve rebote y dos asistencias. Casi firma un doble-doble en un partido en el que mostró una gran versión de sí mismo.

James Harden, desaparecido

El escolta de los Rockets no consiguió dejarnos ese duelo que todos ansiábamos ver. A diferencia del partido anterior en Oakland, Harden no tuvo su noche, o por lo menos dentro de lo que nos tiene habituados. 17 puntos y 11 asistencias. Una de sus principales armas, el triple, no funcionó. No anotó ninguno de los cinco triples intentados por él en el partido. Finalmente, no consiguió liderar a su equipo cuando más lo necesitaban y la apisonadora de la Bahía de San Francisco, les acabó pasando por encima sin piedad alguna.

Golden State da un golpe sobre la mesa

Con esta victoria sobre Houston, los Warriors solo necesitan ganar en Orlando para cerrar una semana perfecta en la que han conseguido batir a rivales pesados. Cavaliers, Oklahoma y Rockets no son equipos a los que se consiga ganar todos los días, y los Warriors han conseguido convertir esto en su rutina. Muchas dudas saltaban en la Bahía tras la derrota frente a Memphis Grizzlies en la prórroga, pero han conseguido que se les vuelva a tener ese miedo que tanto les caracteriza. Los Warriors van a por el campeonato, y han demostrado ser capaces de enfrentarse a cualquier equipo en esta liga. Semana casi perfecta, solo les quedaría hacer pleno en Florida y finalizar estos siete días que quedarán para el recuerdo de más de uno.