Ya ha llegado el Sweet 16, los dulces dieciséis que se enfrentarán por conseguir la máxima gloria. Ya se han finalizado las dos primeras rondas de esta locura que acontece en el mes de Marzo y que nos ha dejado muchos titulares y sorpresas. Una de ellas, involucra a uno de los equipos de los que vamos a hablar en el día de hoy. Michigan Wolverines han sido una de las cenicientas de esta temporada. Nadie esperaba que consiguieran llegar tan lejos, pero a ellos les va eso de desafiar las reglas establecidas. Algunos lo han denominado como “el equipo del destino”, quizás porque un avión cambió su suerte. 

Hay que decir que su temporada ha sido una de las peores para el programa. Es un equipo que nos tiene acostumbrados a jugar un baloncesto de gran calidad y esta campaña no han sido capaces de superar el nivel que se rige a un equipo de estas características. Según iba avanzando la temporada, los resultados llegaban. Finalmente, consiguieron reconducir la situación y llegar al Big Ten con opciones de luchar por el trofeo de la Conferencia. Entonces, sucedió algo totalmente inesperado. Su avión se salió de la pista y estuvieron a punto de quedarse sin participar en la semana de los campeones. Llegaron al estadio con escasas horas de descanso y consiguieron ganarlo todo.

Fue llegar y besar el santo, contra todo pronóstico, consiguieron su clasificación directa al March Madness. Su torneo no ha sido nada sencillo. Han tenido que trabajárselo bien frente a Oklahoma State y Louisville, dos equipos nada fáciles de batir. Los Wolverines cuentan con varios jugadores que son todo un rompecabezas para las defensas. Derrick Walton, el máximo anotador del equipo, terminó con 26 puntos y 11 rebotes en la victoria sobre los Cowboys pero frente a Louisville no tuvo su noche. Esto no fue precisamente un problema para Michigan que contó con la aportación de un Moritz Wagner que terminó con 26 puntos. 

Delante tienen a unos Oregon Ducks que han demostrado ser uno de los equipos más en forma durante toda la temporada. Cuentan con un Dillon Brooks que apesta a estrella y que fue elegido mejor jugador de Pac-12 por encima de un tal Lonzo Ball que tanta expectación creó y sigue creando. Los Patos verdes y amarillos han sido todo un rodillo, pocos rivales pudieron hacerles sombra esta temporada pero en el Madness, los logros conseguidos durante la temporada no sirven para nada. Esto es otra historia diferente y ya lo sufrieron en sus propias carnes en su anterior encuentro.

Los Ducks, a pesar de ser uno de los grandes favoritos, no estarían aquí si no fuera por la victoria con mucha tensión conseguida frente a Rhode Island. Oregon fue el mejor equipo durante 33 minutos del encuentro, pero aprendieron una valiosa lección. En el Madness no se puede regalar nada ni siquiera los últimos siete minutos del encuentro cuando ya ostentas una cómoda ventaja. En esos últimos minutos, encajaron un parcial de 27-8, y el pase al Sweet 16 se les complicaba. Consiguieron cerrar el partido y llevarse la victoria por 67-45. Cometieron numerosas pérdidas que fueron castigadas de la peor manera posible, pero ya es momento de pasar página.

¿Se acabará la flor de Michigan? Nunca se sabe lo que puede pasar en un enfrentamiento entre estos dos equipos, pero Oregon son los claros favoritos para salir victoriosos hacia el Elite 8. No pueden cometer errores tontos porque les pueden condenar y hacer que abandonen la competición antes de lo esperado. Estos Wolverines tiran de garra y corazón y no saborean la derrota desde su incidente en el aeropuerto. Habrá que ver cuáles de estos dos equipos se hace con la victoria.