Hace escasos días, Kerr se mostraba muy optimista por la marcha de la recuperación de su alero estrella. Hacía ejercicios sin oposición, rutina de jugadas, etc. Días después, Kerr tiene la certeza de que estará para antes del inicio de los Playoffs.

El récord sin Durant

En este mes sin Durant, y contando la derrota en Washington, partido donde sufrió la lesión, los Warriors han cosechado un récord de 8-5 sin su fichaje estrella del verano. Tres de esas derrotas fueron seguidas, contra Boston, Minnesota y San Antonio (en el partido sin titulares) en ese orden. Después de visitar a Popovich y sus legionarios, los Warriors empezaron a meter una marcha más para no perder el liderato y han ganado los siguientes seis partidos de forma consecutiva, racha en la que se encuentran actualmente.

Entre Curry y Klay han conseguido volver a tener el tino que habían perdido últimamente, y llegan con buenas sensaciones a las últimas fechas previas a los Playoffs. En esas podría estar la vuelta de Durant, algo que su entrenador desea, ya que no quiere esperar hasta la postemporada, sino darle algo de coba al alero capitalino para que vaya entrando en la dinámica del equipo de nuevo: “creo que facilitaremos su reincorporación haciéndole jugar pocos minutos para empezar. Así él puede coger su ritmo e ir acondicionándose”. De confirmarse los plazos de los que habla Kerr, Durant estaría para los tres últimos duelos de la temporada de los californianos, sin ningún back-to-back, todos en casa y con un único partido duro, ante los Jazz.

La vuelta, volverá a hacer más temibles a unos Warriors, que sin él, y sin el banquillo del año pasado han conseguido sacar las castañas del fuego y conseguir volver a la senda de la victoria después de unas semanas de adaptación sin su estrella. Se antoja vital para unos Playoffs en los que los Warriors aún no conocen con seguridad su oponente, pero que tiene muchas posibilidades de salir de entre los Nuggets de un Jokic en estado de gracia, o unos Blazers que vuelven a ganar partidos después del mercado invernal y esa muy beneficiosa incorporación de Nurkic, además del buen nivel de su dúo exterior Lillard-McCollum.