El pasado sábado, 25 de marzo, Utah Jazz perdió contra los Ángeles Clippers y Rudy Gobert habló de las impresiones que le dejó el partido. Si analizamos sus declaraciones podemos verlo desde dos puntos de vista: aprendió una lección importante o impartió una a sus compañeros.
El pívot francés de los Jazz habló con el corazón, algunos dirían que demasiado abiertamente, a raíz de una frustrante derrota ante un oponente directo para la postemporada. Se refirió a algunos de sus compañeros de equipo, aunque ninguno por su nombre, por su falta de esfuerzo e interés por hacer el ‘trabajo sucio’ que es los que gana los partidos.
"Tenemos chicos que compiten, pero algunos de nosotros no lo hacemos", dijo Gobert después de esa derrota ante Los Angeles Clippers el sábado. "Algunos de nosotros sólo pensamos en anotar” sentenció el líder en el apartados de tapones esta temporada.
Estas declaraciones han sido tomadas estos días por los medios locales como un intento de Gobert para afirmarse como un peso pesado del vestuario. "Todavía estoy trabajando en ser un mejor líder", dijo después. "Hablo con mis compañeros, estoy mejorando, es como todo en la cancha. Estoy tratando de mejorar".
El francés que en sus inicios era un simple activo ofensivo es ahora uno de los mejores hombres de la pintura de la NBA, producto de su dedicación en los gimnasios con ejercicios de fuerza. Y si Gobert se va a transformar en un hombre fuerte en el vestuario, también le tomará algo de entrenamiento.
Los comentarios señalados pueden haber momentáneamente alterado algunos egos de ciertos jugadores. Después de estas declaraciones los Jazz celebraron una reunión de equipo para despejar el aire. George Hill expresó que los comentarios de Gobert podrían haber sido un poco inmaduros. "Eso es lo que hacen los malos equipos y los malos compañeros", dijo Hill.
Muchos de las leyendas de la NBA no han tenido problemas para dar un tirón de orejas a sus compañeros de equipo, jugadores como Michael Jordan, Kobe Bryant ó Karl Malone son algunos ejemplos.
Gobert, por supuesto, no está en esa liga de jugadores- pero tal vez haga falta que alguien en Utah tome la palabra y aliente a los demás.
"Tal vez no era la mejor manera de hacerlo", dijo Gobert. "Pero se trataba sólo de ganar, era sólo de nosotros como un equipo, solo quiero ganar, quiero que seamos mejores equipos".
El novato, que una vez fue conocido por ser desgarbado y torpe, que estuvo tiempo a caballo entre la NBA y la D-League, es ahora un firme candidato a Jugador Defensivo del Año y a pertenecer al mejor quinteto NBA. Sus palabras podrán llevar algo de peso, si no lo hacen ya.
El Jazz había estado buscando un jugador lider en los últimos años. Gordon Hayward es el mejor jugador del equipo, su máximo anotador, pero no siempre ha sido un líder naturalmente vocal en el vestuario. Ese papel lo ha protagonizado Hill, sin embargo, será un agente libre este verano y puede que esté lejos de renovar.
"Gordon está definitivamente liderando con el ejemplo", dijo el veterano pívot, y compatriota de Rudy Gobert, Boris Diaw cuando le pidieron que describiera el liderazgo de los Jazz. "Tenemos a George como un experimentado escolta que también es un buen líder". A Rudy Gobert aún le queda práctica para ser un buen líder.