Han tenido que pasar décadas desde que un rookie mostraba un impacto tan inmediato como Ben Simmons. El australiano, números aparte, ha cambiado con su presencia el sistema del equipo, la distribución de minutos y el rumbo de una franquicia. A día de hoy podemos decir que Joel Embiid ya no está solo.

Una rara avis del baloncesto moderno

Imagen: Nba.com
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La altura de un ala-pívot, la fuerza de un alero y la visión de un base, así podríamos definir las cualidades de Ben Simmons. Muchos expertos afirman que el australiano puede considerarse un jugador ambidiestro por su manejo de balón y por su confianza a la hora de penetrar por ambos flancos del ataque.

Lidera las transiciones del equipo, y tiene una capacidad privilegiada para jugar en campo abierto. Su dominio de los partidos se basa en la penetración y en tiros cercanos al aro, y es que el lanzamiento de tres es su talón de Aquiles

Si bien es cierto que Ben Simmons está aún en continuo desarrollo, el australiano presenta actualmente una deficiencia en el triple. A día de hoy, el rookie ha intentado sólo cinco triples ¡y no ha anotado ninguno! Cifras que deberían mejorar con el paso del tiempo, pero que llaman la atención por la situación actual que presenta la liga.

Números de All-Star

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¿Podría Ben Simmons ser All-Star este mismo año? Es algo que se preguntan muchos expertos a estas alturas de temporada. En los últimos 25 años, sólo 12 jugadores han participado en el partido de las estrellas en su temporada de novato. Entre ellos encontramos leyendas como Ralph Sampson (1984), Michael Jordan (1985), Hakeem Olayuwon (1985), Patrick Ewing (1986), David Robinson (1990), Shaquille O´Neal (1993) o Tim Duncan (1998). El último fue otra estrella que vio truncada su temporada de novato por una inoportuna lesión: Blake Griffin (2011)

Los números de Ben Simmons asustan. Es el segundo jugador en la historia tras Oscar Robertson con dos triples-dobles en sus primeros nueve partidos. El número uno del Draft de 2016 promedia 18.0 puntos, 9.8 rebotes, 8.2 asistencias y 1.6 robos de balón por encuentro.

Estos promedios llaman la atención de cualquier aficionado, más aún cuando se trata de un jugador que ha estado una temporada sin jugar. Simmons sufrió una fractura en el quinto metatarsiano de su pie derecho antes del inicio de la pasada campaña. Dicha lesión le mantuvo alejado de las canchas y su regreso al máximo nivel estaba en entredicho. Incluso su hermana pequeña publicó una serie de tweets bromeando acerca de la inactividad de Ben. Al rookie australiano no le sentaron nada bien esas publicaciones, pero siguió peleando por volver. Todo ello, como se puede observar, ha quedado en el olvido. 

La prudencia por bandera

Hoy en día los jugadores prestan mucha atención a redes sociales o medios de comunicación, e incluso se encuentran más cerca de los aficionados que antaño. La expansión de la liga a nivel mundial y los eventos publicitarios que proponen han involucrado a los jugadores en todo lo que rodea al juego. No obstante, Ben Simmons ha sabido dar señales de prudencia y sensatez en cuanto su impacto en la liga a corto y medio plazo.

El jugador aussie concedió una entrevista el pasado 19 de Octubre  a medios de todo el mundo. Simmons se mostró cauto y prudente, refiriéndose a las expectativas creadas en torno a él: "Tengo mucho que probar, pero no estoy preocupado por lo que la gente diga. Tengo que estar bien, con la cabeza fría para que no me crea toda las expectación que he creado" comentó.

Asimismo, aboga por el trabajo diario como clave de un éxito futuro y prefiere centrarse en el presente: "Estoy emocionado por el futuro, mucho. Pero me enfoco en el presente. Tengo que trabajármelo, pero creo que puedo ser uno de los mejores jugadores de la liga. Será cuestión de trabajo" afirmó Simmons. 

Por último, Simmons piensa que su estilo se adapta a perfección a la NBA actual y explica cuáles son sus intenciones dentro de la cancha: "Cuando tengo el balón, trato de crearme mi propio espacio. Y si puedo escoger a un rival en transición y llevármelo conmigo hasta dentro, también lo hago" explicó . 

Impacto en la franquicia

Imagen: Nba.com
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En un pasado no muy lejano, todo el mundo criticaba la pésima gestión de Sam Hinkie, y la escasa moralidad que encierra el controvertido Tanking. Un equipo desolado por la lesión de Embiid, los apuestas fallidas de Okafor o Noel, y la estancia prolongada de Saric en Europa necesitaba un soplo de aire fresco.

Ese soplo de aire fresco tenía nombre y apellido: Ben Simmonns. El debut del australiano en la mejor liga del planeta ha consolidado esa ilusión creada por Joel Embiid a finales del curso pasado. Su impacto es tal, que nadie está excesivamente preocupado por la baja del actual número uno del Draft 2017, Markelle Fultz. El optimismo ha llegado a la ciudad del amor fraterno.

Diferentes quintetos, misma filosofía

El mérito de este impacto recae también en gran parte a la gestión de Brett Brown al frente de los 76ers. El técnico formado en la Universidad de Boston ha sabido rodear a Simmons de las piezas que encajan en el puzzle. La rotación actual de los Sixers está confeccionada para que Simmons sea el capitán general de la primera unidad, y explote al máximo sus virtudes en cancha.

Imagen: ThePostGame.com
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Brett Brown ha empleado en estos primeros diez partidos de regular reason cinco quintetos diferentes en los que han participado hasta ocho jugadores. En todos ellos hay un denominador común, grandes tiradores rodeando a Simmons y un jugador alto:

Bayless Redick Covington Simmons Embiid
@WAS (Derrota) Vs BOS (Derrota)  @DET (Victoria) vs HOU (Derrota)  
Bayless Redick Covington  Simmons Johnson
@TOR (Derrota)        
Bayless Covington Simmons Saric Embiid
@DAL (Victoria) @HOU (Victoria)      
Redick Covington Simmons Saric Embiid
vs ATL (Victoria) vs IND (Victoria)      
Redick Cocington Simmons Saric Holmes
@UTA (Victoria)        

Este tipo de quinteto mantiene una misma idea: Ben Simmons es el base del equipo. En una liga donde el small ball predomina por encima de todas las cosas, Philadelphia 76ers encomienda las labores de organización a un falso alero de 2,08m. 

Imagen: Nba.com
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Otro aspecto reseñable en la confección de los quintetos es que en ninguno de los empleados aparece un base que haga jugar al equipo. Bayless, titular en seis encuentros, presenta otras carácteristicas muy diferentes, como son la anotación o la capacidad de crearse sus propias situaciones de tiro. Prueba de ello es que TJ McCornell, único base puro en plantilla, es el encargado de darle descanso a Simmons. Salvo momentos puntuales, McCornell no ha coincidido con el australiano en pista.

En búsqueda del equilibrio ofensivo

La importancia del triple en la liga es un hecho irrefutable y Simmons carece de soltura en esta parcela del juego. De hecho, la semana pasada asistimos a un nuevo récord: menos tiros de dos puntos intentados en un partido NBA (28 por Houston Rockets, el 27 Octubre 2017). Cualquier equipo que renuncie al triple queda en desventaja. 

Brett Brown es consciente de ello, e intenta rodear a sus dos estrellas de ejecutores. Como se puede observar, Embiid (salvo lesión) y Simmons aparecen en todos los quintetos acompañados de jugadores que abren la pista. Bayless, Redick, Covington y Saric son reconocidos anotadores con alto un porcentaje en tiros de tres. De este modo, las defensas deben centrar su atención tres focos bien distintos: el pick&roll Simmons-Embiid, el juego al poste del camerunés y los balones doblados Ben Simmons a los tiradores abiertos. 

Estas variantes ofensivas apoyadas en el talento individual de sus hombres han logrado que Brett Brown tenga armas suficientes para jugar a tanteos altos y desplegar un juego más alegre que en temporadas anteriores. Con Simmons & cía, Philadelphia 76ers son un firme candidato para entrar en los Playoffs 2017. Trust the Process.