LeBron James suma y sigue. "El elegido" logró la pasada madrugada su tercer triple-doble en los últimos cuatro partidos, y lo que es más, alcanzó la estratosférica cifra de 60 triples-dobles a lo largo de toda su carrera en la mejor liga de baloncesto del mundo.

En el encuentro ante los Utah Jazz, con victoria para los Cavaliers por 109-100, LeBron anotó 29 puntos, a los que añadió 11 rebotes y 10 asistencias. Además, el tres veces MVP acabó el encuentro con muy buenos porcentajes (60% en tiros de campo y 100% en tiros libres).

Con los ya mencionados 60 triples-dobles James ha superado al mítico alero de los Boston Celtics, Larry Bird, en la lista de jugadores con más triples-dobles en la historia de la NBA. El de los Cavs ya es el sexto jugador en dicha lista, por detrás de otras superestrellas históricas como Wilt Chamberlain, el sorprendente Jason Kidd o Magic Johnson. Rusell Westbrook también se cuela en cuarta posición siendo la mayor amenaza para el líder de la clasificación con 181 triples-dobles, Óscar Robertson.

LeBron James parece estar viviendo una segunda juventud. Y es que, a sus casi 33 años (los cumple el próximo 30 de diciembre) y 15 temporadas en la NBA, el de Ohio vuelve a ser firme candidato a convertirse en el MVP de la liga. Anotando casi 29 puntos de media por partido, además de estar reboteando y asistiendo más que nunca en su carrera, el '23' ha afirmado que quiere "romper moldes". LeBron quiere tumbar el mito que dice que una vez que pasa los 31 años, un jugador empieza su cuesta abajo.

Lo cierto es que cuando llegó a Miami en el verano de 2010 vio como sus números descendieron por compartir vestuario con otras superestrellas como Wade y Bosh. Sin embargo, en este 2017, siendo mucho más veterano, ha vuelto a incrementar sus prestaciones en lo individual. No obstante, parece que también comienza a dar sus frutos en lo colectivo, aupando a los Cleveland Cavaliers a la segunda plaza de la Conferencia Este con un récord de 22 victorias y 8 derrotas.

Podemos intuir, por el nivel que está mostrando, que al récordman de la liga aún le queda mucho que ofrecer al aficionado al baloncesto. James es un competidor nato y no cejará en su empeño de superar el mito de Jordan. Nadie sabe si lo conseguirá o no, pero lo que es seguro es que el bueno de LeBron nos seguirá brindando madrugadas para el recuerdo.