Dos equipos que presumiblemente estarán en los playoffs cuando termine la regular season se enfrentaban en uno de los mejores escenarios posibles, el TD Garden. Los de Brad Stevens encadenaban 7 partidos seguidos ganando mientras que el equipo que dirige Alvin Gentry venía de llevarse una prórroga contra los Knicks.

Sobre el guión el partido podría presentarse como un duelo entre el juego exterior contra el interior. La clara superioridad de los Pelicans en la pintura contrarrestaba a los grandes talentos que tienen los Celtics en el perímetro, estilos diferentes medirían sus fuerzas para saber cuál es más dominante.

Las "Torres Gemelas" empezaron dominando

Los dos jugadores interiores de los Pelicans, Anthony Davis y DeMarcus Cousins, comenzaron el partido haciendo efectiva su teórica superioridad ante Al Horford y Baynes, que defensivamente no tenían nada que hacer ante el poderío físico y técnico de los pívots. "La Ceja" se marchó al túnel de vestuarios en el descanso con 25 puntos y 8 rebotes cuando todavía faltaba medio partido por disputarse.

Rajon Rondo fue otro de los culpables de que los Pelicans dominasen el marcador al finalizar el segundo cuarto. El ex-jugador de los Celtics volvía de nuevo al Garden y en los dos primeros cuartos fue capaz de frenar a la estrella rival. Kyrie Irving no pudo desarrollar su habitual juego ofensivo debido a una gran defensa de Rondo al que incluso se le vio con confianza en ataque.

La ya clásica remontada de los Celtics

Tras irse a los vestuarios diez puntos abajo la reacción de los de Brad Stevens no se hizo esperar. Desde el comienzo del tercer cuarto y liderados por un Irving renacido los Celtics lograron igualar el resultado. Además de Kyrie, los jugadores de banquillo del equipo local rindieron a un muy buen nivel liderados por Marcus Smart, que a pesar de su juventud parece que lleva años en la liga y es el líder de la segunda unidad de los Celtics.

Llegados los minutos de Clutch Time, en los Celtics se respiraba tranquilidad sabedores de que uno de los mejores jugadores del mundo en los instantes decisivos, Kyrie Irving, estaba de su lado. Sin embargo, las acciones del base solamente servirían para forzar el overtime.

El momento de Anthony Davis

Los Pelicans se enfrentaban a su segunda prórroga consecutiva después de haber empatado también contra los Knicks dos días atrás, pero para Anthony Davis el cansancio no existe y empezó la prórroga exactamente igual que lo había hecho en Nueva York: canastón espectacular con fadeaway incluido.

La prórroga seguía igualada y dos grandes canastas de Jrue Holiday marcarían una distancia que sería insalvable para los de Boston. Primero Marcus Morris y posteriormente Irving tuvieron lanzamientos de 3 puntos que volverían a poner las tablas en el marcador pero ninguno de los dos tiros terminó dentro. Se confirmaba así una sufrida victoria para los Pelicans que ya ven positiva su gira por el Este.