Penúltima jornada de liga. Con tan solo cuatro puntos por delante y, un playoff en juego con el Ciudad Real, el Juanfersa Comunicalia hacía acto de presencia este sábado en su feudo, el Palacio de los Deportes de Gijón para batirse en duelo con el Amenabar ZKE Zarautz vasco. Los dos puntos en forma de victoria de los gijoneses y la correspondiente derrota de Ciudad Real daría el pase matemático a los playoff del equipo que dirige Sergio Cotelo. Con un entrenamiento del Real Sporting de Gijón una hora antes en El Molinón, la directiva del Juanfersa buscó atraer la mayor gente posible al partido con precios más que asequibles.

A pesar de todo, las gradas poco a poco iban llenándose, sin demasiado brío, pero con la sensación de que el partido de este sábado no era uno más, sino uno importante, en los que la victoria era totalmente vital. Iosu Baenciaga no daba el partido por perdido, partiendo de inicio con Aritz Makazaga, Ander Atorrasagasti, Ander Garate, Xabat Olaizola, Mikel Iraeta, Iñigo Etxainz y Mikel Martínez en pista, mientras que por su parte Sergio Cotelo formaba con Nacho Fernández, Rubén Río, Raúl Blanco, Ricardo Díez, Abel Serdio, Cesar Beret y David Pellitero. A las siete en punto de la tarde se ponía en marcha el partido en el Palacio de los Deportes de Gijón.

Un fabuloso comienzo da renta al Juanfersa

La intensidad no faltaba en los primeros compases del choque, pero como en todo deporte, siempre hay uno que destaca por encima de otro y, en esta ocasión, le tocaba al Juanfersa Comunicalia empezar de mejor forma el partido. Los gijoneses gracias a dos goles, uno de David Pellitero y Adrián Fernández, disfrutaban de su primera renta en el marcador con solo tres minutos de partido disputados. La renta no hacía otra cosa que hacer, Rubén Río y David Pellitero batían a placer a Aritz Makazaga y, eso obligaba, a Iosu Baenciaga a parar el partido después de cuatro minutos viendo como el equipo local tenía un 4-0 a favor totalmente merecido, siendo el conjunto vasco un mero títere en manos del equipo gijonés.

Ni mucho menos consiguió espabilar el técnico vasco a sus jugadores, totalmente superados por una espectacular defensa del Juanfersa. Rubén Río y Cesar Beret eran dos auténticos muros en la retaguardia y, a la hora de salir a la contra, no se quedaban cortos, materializando dos contragolpes que llevaban el 6-0 al marcador, antes de que después de siete minutos el Zarautz se estrenara en el casillero anotador. En el momento que despertó el Zarautz endosando dos goles consecutivos al conjunto gijonés, apareció Adrián Fernández para mantener la renta de seis goles en el electrónico, con el paso de los minutos jugando a favor del Juanfersa Comunicalia.

Un nuevo arreón del Zarautz, con cambio de portero incluido al hacer acto de presencia sobre la cancha Paulo Ostolaza, hacía que el conjunto vasco recortara su desventaja en el electrónico hasta los cinco goles de adelanto a favor del Juanfersa. Como no podría ser de otra forma, buscando no desfallecer en el encuentro, los gijoneses contemporizaban al máximo sus ataques, aprovechando el tiempo del que los colegiados les permitían disponer. Con el tiempo ya cumplido, David Pellitero dispuso de una pena máxima, la cual no anotó y los jugadores se fueron a vestuarios viendo en el marcador un resultado a favor del Juanfersa Comunicalia de 17-10, cuajando una primera media hora fabulosa, sin fisuras y sabiendo rentabilizar sus ocasiones.

Contemporizar un partido es sinónimo de lograr una cómoda victoria para seguir soñando con los playoff

Tras un pequeño paso por los vestuarios, la segunda mitad se ponía en marcha en el Palacio de los Deportes de Gijón. A pesar de ser espoleados por su técnico en el descanso, el Zarautz no inquietaba en absoluto al Juanfersa durante los primeros compases del segundo tiempo, viendo como los gijoneses no solo no permitían al equipo vasco anotar, sino que la distancia se ampliaba tanto, que al paso por los diez minutos de partido el marcador reflejaba un 23-16 a favor del Juanfersa Comunicalia, amo y señor del choque. En defensa eran un muro infranqueable y en ataque se movía como pez en el agua, una combinación fabulosa que derivaba en un tiempo muerto solicitado por Iosu Baenciaga al ver como sus jugadores eran totalmente superados tras doce minutos.

Poco a poco el paso de los minutos hizo al Zarautz despertar del letargo en el que estaba sumido, consiguiendo recortar distancias hasta los cinco goles e incluso colocarse a tan solo cuatro tantos, una renta de la que no lograron bajar en ningún momento. A tan solo cinco minutos del final y con seis tantos de ventaja el conjunto vasco bajó por completo su intensidad, asumiendo que era imposible remontar la desventaja que tenían. Los menos habituales hicieron acto de presencia en pista y, con ello el partido fue poco a poco muriendo en manos del Juanfersa, que llegó a la hora de partido con un marcador favorable de 32-26, para quedar a tan solo un paso de los playoff de ascenso a la Liga Asobal.