El primer día de montaña de una vuelta grande, en este caso el Tour, siempre es duro. Para los mecánicos, los directores de equipo y, sobre todo, los corredores. El plato pequeño y los piñones grandes pasan a un primer plano donde no todos los corredores se adaptan con facilidad. De la explosividad, la tensión y la velocidad de un sprint se pasa a la regularidad, la paciencia y la economía de esfuerzos en un puerto.

Un primer día de montaña que se convierte en mal de muchos y bien de pocos, ya que sólo son contados corredores los que se adaptan bien del paso de los sprints de las primeras jornadas a los finales en alto de los fines de semana. Contrastan las buenas sensaciones de Blel Kadri, Alberto Contador o Vincenzo Nibali con las malas de Simon Yates, Jurgen Van den Broeck, Haimar Zubeldia, Rui Costa, Andrew Talansky o Jakob Fulgsang, que han comenzado a generar dudas.

Blel Kadri, sorprendente ganador

Una vez formado el grupo de cinco corredores al inicio de la etapa de ayer y el pelotón dejaba hacer, todos los focos pasaron a los cinco hombres de cabeza, que se jugarían la victoria de etapa en las cotas de segunda y tercera categoría. Las miradas estaban puestas en Sylvain Chavanel (IAM Cycling) y Simon Yates (Orica-GreenEdge). Blel Kadri se mantenía en un discreto en un segundo plano.

El ataque del francés del IAM no tuvo reacción inmediata del ciclista del Ag2r, que como si fuese un veterano (sólo tiene 27 años), esperó su momento e incrementó el ritmo poco a poco, sin cambias de ritmo bruscos, en busca de su compatriota. Pronto se vió que Kadri tenía un punto más que sus rivales. Al finalizar el primer puerto, la diferencia era de 45 segundos. Al coronar el segundo, la ventaja se iba ya al minuto y medio. Sólo tuvo que mantener el ritmo para ganar su primera etapa del Tour, muy merecida por la valentía mostrada y por el ataque desde lejos.

Contador y Nibali, reforzados

No sólo Blel Kadri tuvo un buen día y mostró buenas sensaciones, también los dos grandes favoritos a la victoria, Alberto Contador y Vincenzo Nibali.

Uno de los primeros toques de atención de los dos 'capos' fue la apuesta de todo el Tinkoff-Saxo en los últimos kilómetros. Los gregarios de Contador sembraron el caos en el pelotón, poniendo un endiablado ritmo que hizo que muchos y buenos corredores se cortasen, al mismo tiempo que cazaban a las víctimas de la fuga. Vincenzo Nibali, justo detrás del pinteño, y bailando sobre su bicicleta, mostraba también buenas piernas.

Contador incrementó el ritmo tras la pancarta del último kilómetro para quedarse solo con el italiano. Por detrás cedían todos los demás: Valverde, Porte, Rui Costa, Mollema, Pinot y Van Garderen, entre otros.

Los cortes y la mala suerte siempre presentes

Muchos corredores no pasaron bien este primer día y perdieron aún más tiempo con respecto a Nibali, que afianza su liderato y obtiene más rentas (excepto con Contador).

Fueron los casos de Richie Porte, Alejandro Valverde, Thibaut Pinot o Tejay Van Garderen, que no pudieron seguir el ritmo de los dos de cabeza aunque. Sólo Porte, dosificando, pudo acercarse a Nibali y Contador.

Jurgen Van den Broeck y Michal Kwiatkowski se vieron afectados por los cortes. El belga no se ha podido adaptar bien ni al primer día de montaña ni a la lluvia y espera mejorar su rendimiento en los próximos días. El polaco parece que va a ir a menos, a causa de los excesos en las primeras jornadas del Tour.

La mala suerte también estuvo presente en los casos de Andrew Talansky y Jakob Fulgsang, que estuvieron involucrados en caídas. El primero cuando estaba en el pelotón y el segundo cuando rodaba descolgado y era ayudado por un compañero a reintegrarse en el grupo.

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Sobre el autor
Nacho Primo Genis
Buscaba libertad para escribir unas cuantas líneas sobre mi deporte favorito, el ciclismo, y encontré VAVEL a principios de 2014. Debilidad por el ciclocross y responsable de @Ciclismo_VAVEL.