Veinte años. Dos décadas. Un quinto de siglo. Se dice pronto pero cuesta mucho conseguirlo. Veinte años al máximo nivel, en el mayor escalafón del deporte, en la categoría más alta del ciclismo mundial. Haimar Zubeldia cumplirá en 2017 los veinte años como profesional y lo hará en el conjunto Trek-Segafredo. El ciclista vasco ha renovado con la estructura norteamericana que jugará a grande el próximo año con el fichje de Alberto Contador.

Regularidad, casta y amor al ciclismo

Media vida lleva el ciclista de Usurbil dando pedales en el World Tour. Uno de los grandes nombres del extinto Euskaltel-Euskadi. Con el equipo vasco logró dos top 5 en el Tour de Francia -también fue octavo en 2006-, 'su carrera', gracias a una regularidad que le ha valido para ser segundo, cuarto y quinto en la general del Criterium du Dauphiné y cuajar también buenas actuaciones en la Volta a Catalunya. Además, en el 2000 consiguió su triunfo más importante en la general de la Bicikleta Vasca -actual Vuelta al País Vasco-.

Trabajará con Contador de nuevo, tras conquistar junto al madrileño el Tour de Francia 2009

Pasó un año en Astana, junto a Alberto Contador, trabajando para él en la consecución del Tour 2009 y siendo líder del equipo en la Vuelta a España. Hablando de la carrera española, al ser Zubeldia un 'hombre Tour', la Vuelta siempre ha aparecido en un segundo plano en su preparación. Aun así, su regularidad le valía para acabar a menudo entre los 10-15 mejores de la gran vuelta nacional.

Su última etapa, la de Trek, arrancó en 2010. Cuando aquello, el actual Trek-Segafredo se denominaba Radioshack. En ese 2010 consiguió su segundo triunfo como profesional: etapa y general en el Tour de l'Ain. Y es que el ciclismo no ha sido muy agradecido en cuanto a triunfos se refiere con el guipuzcoano, destinado siempre a correr con regularidad y lejos de los triunfos para buscar un buen puesto en la general. Su combatividad y su amor por el ciclismo le ha permitido exigirse hasta el límite.

La reinvención de Zubeldia

Ya bien entrado en la treintena, su frescura se ha visto limitada, así como sus puestos en grandes vueltas. Además, las caídas, lesiones y abandonos lastraron su carrera. Eso sí, el Tour siguió siendo el Tour. La 'Grand Boucle' le hacía olvidar lo malo y sacaba lo mejor del vasco. Sexto y octavo en 2012 y 2014, siendo estos sus últimos grandes resultados en la general de la carrera francesa. 'Su carrera' como decíamos antes. Y ya de cara a 2015 tuvo que reinventarse. 

Escasos triunfos pero grandes resultados, sobre todo en el Tour -dos top 5 y cinco top 10-

La llegada de Bauke Mollema y la edad de Zubeldia le relegaron en el escalafon del equipo. Dejó de ser líder habitual para ser un gran gregario, con experiencia y casta para ayudar a Mollema y también para reinventarse, convirtiéndose en un 'cazafugas'. Esta nueva dimensión se pudo ver en la Vuelta 2015, en donde fue un asiduo a las escapadas de días importantes -véase Sotres o Cercedilla- y rozó el triunfo de etapa, un éxito ansiado por Zubeldia, en Riaza.

En 2016, a sus 39 años, fue el principal apoyo de Mollema en el Tour -finalizó en el puesto 24 de la general- y ejerció como líder del equipo en la Vuelta, buscando escapadas y triunfos -acabó sexto en la jornada reina en el Aubisque viniendo de la fuga- y finalizando 19º de la clasificación general. La clásicas italianas cerrarán su temporada. Lo hará en Lombardía este sábado, sabedor de que seguirá en Trek el próximo año.

"Una leyenda"

"El ciclismo es parte de mi vida, dijo hace un tiempo en una entrevista a Ciclismo Internacional

"No me veo corriendo en otro equipo", declaró Zubeldia sobre el que será su octavo año en la estructura americana. El guipuzcoano es conocedor de la "nueva dimensión" que cogerá el equipo de cara a 2017, gracias a las llegadas de ciclistas como Contador o Degenkolb. El de Usurbil será un gran gregario para Alberto Contador. "Ya corrí con él hace unos años por lo que nos conocemos", explicó Zubeldia. Por su parte, el mánager del equipo, Luca Guercilena, demuestra la estima y la grandeza del ciclista con pocas palabras: "Haimar es una leyenda. A pesar de que no gana mucho tiene un palmarés increíble". Una leyenda, veinte años, dos décadas, un quinto de siglo, media vida al máximo nivel.