Día redondo para el corredor español, que mejor forma de celebrar su 34º cumpleaños que ganando una etapa de Giro de Italia. El vasco atacó a falta de casi 30 km para meta y se exhibió, dejó a todos los corredores de la fuga y finalmente les metió más de dos minutos.
En cuanto a la lucha por la magia rosa no hubo novedades, Fromme se mantuvo firme a los ataques de Tom Domoulin y se va a alzar mañana en Roma con su primer Giro de Italia. La gran sorpresa de la jornada fue un nuevo estallido de los hombres de arriba, si ayer fuera Yates hoy sería el francés Pinot. El que fuera tercero en la general perdió más de 20 minutos finalmente y el tercer cajón del podio que fue a parar a manos del colombiano Miguel Ángel López.
La mala etapa de ayer de Simon Yates, perdiendo más de media hora, hizo que el corredor vasco del Mitchelton Scott tuviera libertad en busca de la etapa de hoy, y así fue, se metió en la fuga junto a grandes corredores. Tras la gran etapa de ayer y la gran dureza que hubo, los corredores de la general se lo tomaron con más calma y todo hacía presagiar que la fuga iba a llegar y se iban a jugar la penúltima etapa. Pero Mikel Nieve sabía que era el más fuerte de los escapados y poco a poco fue poniendo un ritmo cada vez superior y fue descolgando a todos hasta quedarse en solitario a falta de menos de 30km. Yendo ya en solitario se dosificó y mantuvo a ralla a los rivales que le perseguían, finalmente entró en meta con más de dos minutos de renta sobre el holandés Robert Gesink.
Con la victoria de etapa ya decidida todos lo focos estaban puestos en la lucha por la general, el podio, la maglia blanca y la lucha por entrar en el top ten. En cuanto a la general, la primer sorpresa de la jornada llegó a falta de 41 kilómetros cuando Pinot reventó. Astana olió sangre y siguió con el ritmo trepidante subiendo Tsecore y continuando en Saint Pantaleon. Con Pinot fuera, Miguel Ángel López se colocaría en la tercera posición del podio, pero todavía quedaban kilometros y el ecuatoriano del Movistar no iba a dar el brazo a torcer. Richard Carapaz quería la maglia blanca, la clasificación de los jóvenes, y el podio.
Tanto Tom Dumoulin como Richard Carapaz lo intentaron pero en la última subida del 101º edición del Giro, pero Froome y Miguel Ángel López se mantuvieron firmes y no se dejaron sorprender. El holandés Dumoulin no disponía de más energías, pero aún así intentó echar el resto a ocho km de meta con cuatro ataques sin éxitos. Tras estos ataques sin demarraje de Froome ayudó a su compañero de equipo en la lucha por entrar dentro del top ten.
Finalmente Froime y Poels lanzaron el sprint para certificar el maillot de la montaña, algo que no le sentó muy bien a Dumoulin. Cabe destacar la gran actuación en todo el Giro de Italia de Pello Bilbao, finalmente han concluido en la sexta posición en la general por detrás de Domenico Pozzovivo.