Después de sufrir el calor y el sol de Argentina, Australia, Oriente medio, Andalucía y Algarve es hora de las clásicas de primavera. El frío, el viento y el pavés serán, junto a los propios corredores, los protagonistas durante este fin de semana de buen ciclismo.

Disputada siempre un día después de la Omloop Het Nieuwsblad, Kuurne-Bruselas-Kuurne supone una especie de preludio de lo que vivirán los corredores en semanas posteriores. Asimismo, la carrera belga será una de las pocas clásicas de esta región donde los mejores velocistas del mundo tienen posibilidad de alzarse con la victoria. La estancia por tierras árabes ha servido para conocer el estado de forma de muchos de ellos, pero no será hasta este domingo en Kuurne cuando la presión por ganar una clásica recalará sobre ellos.

Creada en 1945, Kurne-Bruselas-Kurne ha pasado a ser desde entonces uno de los objetivos de la temporada de muchos corredores, mientras que para otros será la primera toma de contacto con los adoquines. Casi siempre dominada por corredores belgas, cada año son más los foráneos quienes intentan arrebatarles esta hegemonía y especialmente a uno, Tom Boonen. Y es que desde sus inicios solamente diez corredores no belgas han sido capaces de vencer en Kurne. Valére Ollivier, Roger De Vlaeminck, Frans Verhaeghen, Jan Raas y Andrei Tchmil son los corredores con más victorias en esta prueba, con dos títulos. Aunque por encima de todos se encuentra Tom Boonen con tres victorias.

Si bien es una carrera propicia para esprínters, sin embargo nunca se puede garantizar nada en este tipo de pruebas. El año pasado Omega (actual Etixx) y Belkin decidieron romper la carrera desde el inicio, dejando sin ninguna posibilidad de victoria a los más rápidos. ¿Pasará este año lo mismo?

Recorrido

La carrera dará comienzo como no podía ser de otro modo, en Kuurne. Desde allí se dirigirán a la capital de Bélgica, Bruselas, para acabar de nuevo en la localidad flamenca, en un circuito cerrado por sus calles. Pasarán por ciudades como Waregem, Desselgem, Harelbeke, Anzegem, Oudenaarde, Brakel y Voorde.

Serán 195 kilómetros con varias cotas, nueve, y pavés que dictarán sentencia. La subida al Edelare con una pendiente máxima de 7% será la única ascensión en la primera mitad de la carrera. No será hasta el ecuador de la prueba cuando los corredores tengan que afrontar la célebre Houppe, una subida de 1,8 km. con una pendiente máxima del 10%. Aquí se empezarán a formarse las primeras diferencias. Con las piernas ya cansadas y la fatiga acumulada, los corredores tendrán que afrontar, a falta de 75 kilómetros, el Oude Kwaremont, cota de 2 km. y una pendiente máxima de 11,6%. Después de esta subida a los corredores les quedarán solamente Nokereberg y 51 kilómetros completamente llanos, donde los equipos de los esprínters buscarán las mejores posiciones para evitar cualquier tipo de susto que les complique la carrera.

Si por algo se caracteriza a esta carrera es sin duda por el temporal al que se tendrán que enfrentar los corredores. Suspendida en tres ocasiones (1986,1993 y 2013) por climatología adversa, es una de las pruebas más duras del calendario ciclista. Este año las condiciones serán mucho más agradables para los ciclistas, a pesar de las precipitaciones del sábado que dejará el pave y el asfalto completamente mojado se prevé que el sol aparezca a lo largo del día. El viento será el otro factor a tener en cuenta. Los viento soplarán desde el oeste por lo que los corredores lo sufrirán de manera lateral durante toda la carrera, excepto en la meta donde soplará en contra pudiendo ser determinante en un supuesto sprint final.

Favoritos

La situación en el calendario de la Kuurne-Bruselas-Kuurne, justo un día después de Omloop Het Nieuwsblad deja bastantes dudas de qué corredores disputarán la carrera. Todo dependerá de las sensaciones con las que se encuentren a lo largo del fin de semana. Lo que está claro es que los grandes velocistas acudirán al evento con un objetivo en mente, ganar en Kuurne. Entre los candidatos a ganar el domingo se abre un abanico de posibilidades enorme, donde cabe destacar a hombres como Mark Cavendish (Etixx) que ya ganó en la edición de 2012 y que con cinco victorias en este inicio de temporada quiere seguir demostrando que ha vuelto el mejor Cavendish. Alexander Kristoff (Kathusa) posiblemente el hombre que más en forma del pelotón esté, viaja a Bélgica con ganas de seguir cosechando triunfos. Después de este bonito duelo, suenan nombres como Elia Viviani (Sky) que contará con la ayuda de Ian Stannard y de un Bradley Wiggins que busca prepararse para la París-Roubaix, Nacer Bouhanni (Cofidis) todavía sin grandes resultados este año, Matteo Pelucchi (IAM) y el belga Van Avermaet (BMC), quien conoce muy bien el empedrado de esta prueba y que siempre suena como favorito en este tipo de clásicas. En caso de que la carrera se rompa y se produzca una selección dentro del pelotón será la oportunidad de los belgas Tom Boonen (Etixx) máximo ganador de esta prueba con tres triunfos y Phillipe Gilbert (BMC) siempre en la lista de favoritos a ganar en las clásicas belgas. Por último, hacer eco a la ausencia de Andrea Greipel (Lotto) que por una infección en la garganta no podrá disputar la prueba belga.

Kuurne-Bruselas - Kuurne 2014

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