Tres llegadas masivas, tres triunfadores distintos. Michael Matthews (Orica-GreenEdge) aprovechó la excelente preparación de la llegada de sus compañeros de equipo y venció con autoridad la tercera etapa de la París-Niza. En unos metros finales poco aptos para un sprint puro, el australiano fue el más listo. Matthews empieza con buen pie 2015, al mojar en la primera carrera que disputa. Además, para redondear la jornada, las bonificaciones en meta le han colocado como nuevo líder de la prueba.

La tercera etapa en línea de la París-Niza arrancó en Saint-Amand y finalizó en Saint-Pourçain. 179 kilómetros de recorrido con previsible final al sprint, por tercer día consecutivo. Tres cotas en la parte intermedia forzaron un poco al pelotón, que disfrutó del último día de llano en la Carrera del Sol. La recta de meta de Saint-Aman picaba ligeramente hacia arriba, por lo que otros corredores entraban en las apuestas.

Gilbert, Vachon y... Voeckler

La Carrera del Sol siguió rumbo al sud, persiguiendo el sol y el calor de la costa. Philippe Gilbert (BMC) y Florian Vachon (BGS) tenían prisa por llegar y demarraron en el kilómetro nueve. Una fuga de dos unidades no preocupó demasiado al pelotón, que les dejó hacer. Gilbert aprovechó el corte para coger puntos para el maillot de la montaña. Por detrás, hubo más movimiento en busca de la escapada. Bradley Wiggins (SKY) y Antoine Duchesne (EUC) contratacaron para cazar al dúo cabecero. Con tres minutos y veinte segundos de desventaja, Wiggins y Duchesne cancelaron la intentona y fueron engullidos por el pelotón.

En la primera cota del día, la Croix du Chêne (2,1 km al 4%), Gilbert pasó en cabeza. El gran grupo lo hizo a 2’55’’. El interés de varios conjuntos para avivar la etapa propició un rápido acercamiento del pelotón a la fuga. Con la escapada a poco más de un minuto, apareció una vez más Thomas Voeckler (EUC). El valiente ciclista francés saltó del grupo y con una gran arrancada llegó a la altura de Gilbert y Vachon.

(Foto: @ParisNice).

La llegada de Voeckler a la fuga insufló un soplo de aire fresco a sus opciones. En el paso por la última cota puntuable de la jornada, la Cota de Vicq, Gilbert reafirmó su candidatura al maillot de lunares rojos. Etixx-Quick Step, el conjunto del líder Michal Kwiatkowski, controló el ritmo del gran grupo durante gran parte de la etapa. El trio tenía cinco minutos de ventaja y los conjuntos de los velocistas empezaban a asomar su cabeza por la parte delantera del pelotón.

La clase de Matthews

Con el ímpetu y la calidad de sus integrantes, la fuga consiguió llegar viva a los últimos veinte kilómetros. Philippe Gilbert fue el primero en renunciar a ella. El campeón belga fue neutralizado a 18 kilómetros de la meta. Voeckler y Vachon intentaron aguantar un poco más. Su intención se desvaneció con el ataque de Paolo Tiralongo (AST). El veterano ciclista italiano cogió unos metros y neutralizó la fuga del día. Respondiendo a Tiralongo saltaron del pelotón dos de los hombres potentes de Ag2r. Romain Bardet y Jan Bakelants arrancaron con fuerza y cazaron a Tiralongo. Los tres valientes fueron neutralizados gracias al empuje de Lotto-Belisol a falta de dos kilómetros.

Los últimos kilómetros de la etapa no fueron fáciles. La aproximación a la meta pasó por un repecho y varias curvas que estiraron al pelotón. Orica-GreenEdge fue el conjunto más inteligente. Los australianos se pusieron en cabeza y no dejaron que nadie pudiera robarles la posición. El lanzamiento fue perfecto para su ejecutor. Michael Matthews respondió con clase al trabajo de sus compañeros.

Con una posición inmejorable, el australiano arrancó y nadie pudo seguirle. Michael Matthews levantó los brazos con autoridad y sacó una bicicleta de ventaja al segundo clasificado, Davide Cimolai (LAM). En tercera posición entró el también italiano Giacomo Nizzolo (TRE). Gracias a la victoria y a los segundos de bonificación, Matthews se convierte en el nuevo líder de la clasificación general. El maillot no le va a durar demasiado, ya que mañana llega la montaña a la París-Niza.

(Foto: @ParisNice).

La etapa de mañana

La cuarta etapa será clave para la general de la París-Niza. Tras el prólogo y tres etapas con final al sprint, la primera gran etapa de esta edición entra en acción. 204 kilómetros de recorrido entre Varennes-sur-Allier y la Croix de Chaubouret. La etapa más larga de la Carrera del Sol tendrá un final en alto en un puerto de primera categoría, con diez kilómetros al 6’7%. Antes de Chaubouret, siete puertos de montaña endurecerán la ruta. Los aspirantes a ganar la carrera tendrán que aparecer en un terreno idóneo para el lucimiento de los escaladores.

Clasificación