Algo extraño sucedía en Boels-Dolmans pues todavía no habían inaugurado su casillero de victorias. Solo las segundas plazas de Chantal Blaak en la Omloop Her Nieuwsblad y de Amy Pieters en Le Samyn tras Sheyla Gutiérrez (Cylance) eras sus mejores resultados.
Pobre y decepcionante bagaje para un equipo que con la constelación de estrellas que posee, aspira a vencer en todas las carreras. El nerviosismo se había instalado en el conjunto holandés y existía presión por conseguir el triunfo en la Ronde Van Drenthe, la prueba de casa.
Pero todos los malos resultados los atajó de un plumazo la campeona del mundo Amalie Dideriksen. La campeona del mundo que no había aparecido en la temporada dio una lección de estrategia y fuerza junto con el gran apoyo del equipo para llevarse la clásica holandesa. Triunfo que acalla las criticas para el equipo y la propia Diderkisen.
Holanda recibe al World Tour
La segunda prueba World Tour femenino llegaba a la ciudad holandesa de Hoogeven con un perfil mezcla del triple paso por la cota artificial de VAM-berg y hasta ocho sectores de pavé para completar 148 kilómetros.
Sin ataques en los primeros kilómetros y no fue hasta la llegada del sector más duro de pavé con cuatro kilómetros la campeona alemana Mieke Kröger (Canyon/SRAM Cycling) tomó una ligera ventaja y tan solo diez kilómetros después fue alcanzada por el gran grupo.
Los sectores de pavé se iban sucediendo uno tras otro y el pelotón poco a poco iba menguando en tamaño hasta quedar unas 60 ciclistas en cabeza. Tras los adoquines llegaba el paso por segunda vez por la cota de VAM-berg donde se produjeron varios ataques fraccionando el grupo, pero sin que nadie se fuera en cabeza.
Van Dijk mueve 'el árbol'
No fue hasta el tercer y último paso por la cota cuando Ellen Van Dijk (Team Sunweb) lanzó su ofensiva en solitario a falta de 33 kilómetros para la meta. La experta rodadora obtuvo un pequeño margen sobre un grupo de unas 15 ciclistas. La holandesa fue ampliando ligeramente su ventaja pero por detrás Boels-Dolmans con cinco ciclistas controlaban a la de Team Sunweb.
La aventura de Van Dijk murió a falta de 18 kilómetos de meta y nada más atraparla Chantal Blaak (Boels-Dolmans), defensora del título, atacó seguida por Lucinda Brand (Team Sunweb) y Jip Van de Bos (Boels-Dolmans) pero regresaron al grupo poco después.
Elena Cecchini provocó el corte definitivo
Continuaban los juegos de estrategia y ataques hasta que Elena Cecchini (Canyon/SRAM Cycling) lanzó su apuesta llevándose a Brand, Amalie Dideriksen y Elisa Longo (Wiggle High5). El cuarteto se entendió desde el primer momento y afianzaron una renta de diez segundos.
Por detrás, Marianne Vos (WM3 Energy) y Annemiek Van Vleuten (Orica-Scott) eran las que más esfuerzo realizaban para alcanzar al cuarteto. Se colocaron a cinco segundos pero no lograron cerrar el hueco. Era el típico juego del gato y el ratón pues la diferencia oscilaban entre diez y catorce segundos. El triunfo estaba delante si no dejaban de colaborar.
Dideriksen, con facilidad
Dentro del último kilómetro el cuarteto era conocedor de que se jugarían el triunfo. En el sprint final se impuso la lógica y la campeona del mundo demostró porque venció en el Mundial de Doha. La joven danesa venció de forma contundente sobre Cecchini. En tercera posición llegó Brand y Longo cerró el cuarteto. A siete segundos y encabezando el grupo perseguidor Van Vleuten sobre Julien D'Hoore.
Clasificación de la Ronde Van Drenthe
