El corredor de 20 años del equipo EFC-L & R-Vulsteke, un equipo de desarrollo del Trek-Segafredo, murió de la noche a la mañana y aunque aún se desconocen cuáles han sido las causas de su muerte, el director general del equipo, el ex-ciclista Michel Pollentier, ya ha descartado en una entrevista concedida a los medios locales, que las pruebas médicas en ningún momento detectarán ninguna anomalía en el estado de salud de Vanacker. "Vanacker estaba 100% destinado a convertirse en un corredor de primer nivel", ha asegurado Pollentier al medio belga Het Nieuwsblad.
"Nunca supimos qué había ningún problema con su corazón. Todos los años se revisan a nuestros ciclistas y nunca surgió nada”
Pollentier, uno de los cuatro miembros del equipo directivo de la formación EFC-L & R-Vulsteke, ha asegurado que esta trágica noticia tendrá un gran impacto a nivel anímico dentro de la estructura del equipo. "La muerte de Bjarne llega de repente. Discutiremos sobre este asunto a lo largo de la noche de hoy, y decidiremos qué podemos hacer para ayudar a sus compañeros de equipo después de una pérdida tan grande", declaró el ex-campeón belga, todavía consternado por tal traumático suceso.
A pesar de haber cumplido 20 años en el pasado mes de mayo, Vanacker, un robusto todoterreno, había logrado una serie de grandes resultados en la categoría sub-23. Entre sus mejores resultados se halla un décimo puesto en la U23 París-Roubaix y un decimoquinto lugar en el Piccolo Giro di Lombardia. Su última victoria fue en la contrarreloj de la prestigiosa West End de Flandes el pasado año, en el cual su equipo pudo presumir de haber logrado un póker.
También se mostró intratable en algunas de la grandes carreras por etapas, quedándose a la puertas de entrar dentro del top 20 en la clasificación general de dos carreras de prestigio sub23 como son el Giro del Valle de Aosta Mont Blanc y el Triptyque des Monts et Châteaux. La carrera más reciente de Vanacker fue la edición sub-23 de Paris-Tours, donde finalizó en el puesto 44.