Cuando se dice el nombre de Michael Schumacher, palabras mayores se están pronunciando. El nombre del káiser es leyenda viva de la Fórmula 1. El piloto del coche rojo, recordado por muchos. O el hombre que siempre ganaba, por otros. En todo caso, Michael cambió la manera de la Fórmula 1 por completo, de pies a cabeza. Un corredor nato, pues ya con cuatro años sabía manejar un kart en una pista de carreras. El germano apuntaba maneras.

Inicios en Jordan (1991)

Michael debutaba en la máxima categoría con tan solo 22 años. Eddie Jordan llamó al joven piloto para sustituir a Bertrand Gachot en el Gran Premio de Bélgica y para asombro de todos, el teutón mostró un rendimiento atroz. Clasificó séptimo, pero la carrera no la pudo acabar por fallos mecánicos. Esta gran actuación hizo despertar el interés de Flavio Briatore, que quiso a Michael en Benetton-Ford para la siguiente carrera.

Michael en 1991 a manos del Benetton-Jordan / Fuente: michaelschumacher.de
Michael en 1991 a manos del Benetton-Jordan / Fuente: michaelschumacher.de

Época en Benetton-Ford (1991-1995)

En 1992 ganó su primer Gran Premio. El de Bélgica concretamente. Además de conseguir ocho podios y de quedar por delante de Ayrton Senna. Schumi era tercero en el Mundial de Pilotos en su segundo año en la Fórmula 1.

1994: primer Mundial y año triste para la Fórmula 1

Pero el 1 de mayo de 1994 fue un día negro para la Fórmula 1. Se celebró durante ese fin de semana el Gran Premio de San Marino, en Imola. Dos pilotos perdieron la vida ese fin de semana. Roland Ratzenberger, piloto austríaco de Simtek, y el brasileño Ayrton Senna, piloto en aquel entonces de Williams- Renault. Las palabras de Schumacher relataban su profunda tristeza: "De este tipo de accidentes he visto muchos. Accidentes, que se veían mucho peores que el suyo, pero sin esperarse lo peor. Lo ves y te dices que puede llegar a tener un brazo o una pierna rota y resulta que se vuelve a la línea de largada y no sabemos realmente que sucedió. Ninguno proporciona información. Creen que debe mantenerse la competición y volver a empezar todo, porque así debería ser y al final tú no sabes nada, hasta después de que termine la carrera en el podio. Pasquale nos había dicho que (Ayrton) estaba en coma. Pero en cuanto a lo que sé de "coma", existen diferentes tipos y a veces es uno más reservado o a veces es peor de lo que piensas y no quieres creer que algo malo sucedió (se emociona) ¡No quieres creerlo!".

"Aproximadamente, 2 horas después de la carrera el señor (Tom) Walkinshaw me dijo que la cosa iba muy mal. Le dije: 'No. Está en coma. No necesariamente es algo malo, teniendo en cuenta que su golpe fue muy malo'. Más tarde Jackson me dijo que estaba muerto y un minuto después otra persona dijo que todavía estaba en coma. Nos daban información tan poco fiable, que nos hacía pensar bastante en que debió haber ocurrido, a la vez que yo tampoco quería admitir que estaba muerto. Me decía: 'Él va a ser el campeón del mundo! Tal vez se pierda una o dos carreras, pero volverá' (silencio doloroso). Dos semanas más tarde, cuando sentí mucho su muerte, me sentía el peor... Era inconcebible".

Michael, lamentando las muertes de Senna y Ratzenberger en Imola 1994 / Fuente: Getty Images
Michael, lamentando las muertes de Senna y Ratzenberger en Imola 1994 / Fuente: Getty Images

Sin embargo, 1994 fue, dentro de lo que cabe, un buen año en cuanto a lo deportivo para el káiser. Ganó su primer campeonato de Fórmula 1 por un punto de ventaja sobre Damon Hill. En 1995 volvía a ganar el título a manos de un Benetton-Renault.

Época en la Scuderia (1996-2006)

Ya en 1996, Michael fichaba por la escudería del cabalino rampante. Sin embargo en sus dos primeros años a manos del bólido rojo, no pudo superar a los Williams de Damon Hill y de Jacques Villeneuve. Además, en 1997 la FIA le anuló todos sus puntos debido a una acción antirreglamentaria con Villeneuve.

En 1998 y 1999, el finlandés Mika Häkkinen se hacía bicampeón del Mundo con la escudería McLaren. Además, en 1999, Michael sufrió tal accidente en el Gran Premio de Gran Bretaña que le costaría una fractura en una pierna, con el consecuente de no poder correr las siguientes seis carreras del Campeonato.

2000-2004, cinco títulos seguidos

En el 2000, Michael se imponía a Mika Häkkinen, logrando así su tercer Mundial. Ganó nueve carreras en ese año y otras nueve en el 2001, beneficiado por el gran rendimiento del coche de Maranello con respecto a los demás y las órdenes de equipo que beneficiaban al alemán por encima de su compañero Barrichello.

Scuderia Ferrari celebrando con Michael su 7º título Mundial en Bélgica 2004 / Fuente: AFP
Scuderia Ferrari celebrando con Michael su 7º título Mundial en Bélgica 2004 / Fuente: AFP

En 2002 lograba once victorias, igualando entonces a Juan Manuel Fangio en número de Mundiales, pues el káiser ya llevaba cinco. En 2003 batalló también contra otro finlandés, un tal Kimi Räikkönen, quien ya corría para McLaren. En 2004 Schumi ganó su último Mundial en la Fórmula 1, dejando el listón por todo lo alto.

2005 y 2006, lucha encarnizada con Fernando Alonso

Todo lo que sube baja y buen ejemplo de ello es la F1. Tras cinco años de absoluta dominación, Schumi se las vería con un joven piloto español que corría para Renault: Fernando Alonso. A pesar de que el Ferrari era más rápido que el Renault, la fiabilidad del coche rojo pasaba facturaba. Michael perdía en ambos años sus aspiraciones al título, diciendo un hasta luego al Gran Circo.

Época en Mercedes (2010-2012)

Después de su retirada, Schumi fue asesor de pilotos en la escudería italiana del cabalino. Sin embargo, en 2010, Michael asombraba a todos al confirmar que correría para la marca de la estrella durante tres años por un salario de 7 millones de euros anuales.

Schumi, Abu Dabi 2010 a manos del Mercedes de ese año / Fuente: Mark Thompson / Getty Images Europe
Schumi, Abu Dabi 2010 a manos del Mercedes de ese año / Fuente: Mark Thompson / Getty Images Europe

Pero para colmo, el rendimiento de los Mercedes en aquella época era muy distinto al de los Mercedes actuales. Eran superados por muchos equipos; pudiéndose comparar su rendimiento con los Toro Rosso actuales. Michael logró en 2010 un total de 72 puntos, mientras que su compañero y compatriota Nico Rosberg sumó 142.

En 2011 y 2012 las cosas siguieron igual. Aunque en 2011 Schumi mejoró bastante pues su distancia con Rosberg se redujo a sólo 13 puntos. En 2012 obtuvo su mejor posición en Valencia, donde pudo subirse al podio seis años más tarde.

Vettel y Michael se saludan en la última carrera del heptcampeón, Brasil 2012 / Fuente: AFO
Vettel y Michael se saludan en la última carrera del heptcampeón, Brasil 2012 / Fuente: AFO

En 2013 se confirmó que sería Lewis Hamilton quien ocupara el asiento del alemán, diciendo así adiós el piloto más exitoso de la historia de la Fórmula 1 con un total de 91 victorias, siete títulos mundiales, 155 podios, 77 vueltas rápidas, 68 poles y 308 Grandes Premios disputados.

Accidente de esquí

Sin embargo, la vida es cruel. Lo es con quien menos se lo merece. Los buenos se pueden ir de la tierra pero nunca de la memoria o del corazón. En 2013, Schumacher se encontraba esquiando en una pista de los Alpes franceses en la estación de Méribel. El alemán sufrió un accidente al esquiar fuera de pista, teniendo que ser trasladado al hospital. Tras varias operaciones médicas, se le mantuvo en coma inducido durante varios meses y el 16 de junio de 2014 salió del coma, siendo trasladado el 10 de septiembre a su mansión en Suiza.

Desde esa fecha, no se sabe absolutamente nada del estado de salud del heptcampeón mundial pues la portavoz de la familia, Sabine Kehm, ha pedido en reiteradas ocasiones que se respete la privacidad del piloto.