Este fin de semana el Mundial de Fórmula 1 hace una parada en Alemania, concretamente en el circuito de Hockenheim. La lucha por el título sigue presente, especialmente entre Hamilton y Vettel. El de Ferrari, que correrá en casa, le saca ocho puntos al piloto británico e intentará ampliar ese margen en busca del que sería su quinto título.

El año pasado no hubo ninguna prueba en Alemania, por lo que hay que remontarse al año 2016. El ganador fue Lewis Hamilton y le acompañaron en el podio Daniel Ricciardo y Max Verstappen, en segunda y tercera posición respectivamente. En esa ocasión, Ferrari fue el tercer equipo de los tres punteros. Sebastian Vettel cruzó la línea de meta en quinto lugar y Kimi Räikkönen en el sexto. En cuanto a los pilotos españoles, ninguno de los dos acabó en zona de puntos. Fernando Alonso fue duodécimo con el por entonces McLaren Honda y Carlos Sainz decimocuarto con su Toro Rosso.

Desastrosa carrera de Rosberg

El Gran Premio de Alemania del año 2016 estuvo marcado especialmente por la mala actuación del piloto local Nico Rosberg. El alemán de Mercedes salía desde la pole pero no fue capaz de conservar esa primera posición. Una mala salida, como ya le ocurriera en Hungría, fue la causante de que perdiera el tan ansiado primer lugar. Le adelantaron en los primeros metros Hamilton, Verstappen y Ricciardo.

Los problemas no acabaron ahí para Rosberg. El alemán luchó por el podio con los Red Bull y se topó con Max Verstappen. Consiguió adelantar al del equipo de la bebida energética pero le forzó a salir fuera de la pista. Por esa acción los comisarios decidieron sancionarle con cinco segundos de penalización, que debía cumplir en su entrada a boxes.

Cuando Rosberg paró, cumplió la sanción que le habían impuesto, pero el cronómetro falló y terminó parado ocho segundos. Toto Wolff explicó después de la carrera que el cronómetro tardó en arrancar y que decidieron esperar aun así los cinco segundos para asegurarse de cumplir la sanción impuesta íntegramente y evitar así una nueva penalización.

Con todos estos incidentes, Nico Rosberg dijo adiós a cualquier posibilidad de subirse al podio y cruzó la línea de meta en cuarta posición. Con este resultado, Lewis Hamilton le aventajó en el Mundial por 19 puntos. Antes del Gran Premio de Mónaco de ese año era Rosberg el líder con 43 puntos sobre Hamilton. Finalmente el que se llevó el título fue el alemán.