Lewis Hamilton ha protagonizado la imagen del día en la sesión de clasificación del Gran Premio de Alemania, ya que se ha quedado fuera de la lucha por la pole en casa de Vettel y de Mercedes por un problema mecánico.

En la Q1, cuando el piloto británico había marcado un buen tiempo, más que suficiente para pasar el corte, reportaba problemas por radio, ya que no podía cambiar de marchas. Al final de la sesión, se vio obligado a aparcar su monoplaza y a tratar de empujarlo para llevarlo al box; primero por sí mismo y después con la ayuda de los comisarios. Aunque Hamilton decía por radio que el coche funcionaba bien, desde el garaje le decían que detuviera el coche para no poner en riesgo el motor. Al detenerlo, el de Mercedes se quedó algunos minutos agachado junto a su monoplaza, resignado, en lo que ha sido una de las imágenes de la temporada. 

Después de esto, se confirmaba que se trataba de un fallo en el sitema hidráulico, aunque otros apuntaban a que el piloto ha podido romper algún elemento de su monoplaza en su salida de pista. Entre ellos, Esteban Gutiérrez, piloto de desarrollo de Mercedes: "No es necesariamente un fallo de fiabilidad. En la curva uno, Lewis se fue largo", explicó. También añadió que esto es parte de la competición, y que terminarán recuperándose. 

Esta idea también la comparte el mismo Lewis Hamilton, aunque se ha mostrado algo pesimista. "Será una carrera dura porque cuesta adelantar aquí. Será muy difícil remontar como en Silverstone, pero intentaré hacer lo máximo posible. Es lo que hay", comentó a Movistar+ F1 tras terminar la clasificación. No obstante, confesó que se siente bien y que ya lo ha superado, ya que no puede cambiar nada del pasado y prefiere centrarse en el futuro. "Ha fallado el sistema hidráulico en la curva uno y he perdido la dirección", decía para concluir. Y es que será una carrera difícil para el piloto de Mercedes, ya que partirá desde la decimocuarta posición y deberá remontar para continuar en la lucha por el Mundial, que ahora lidera Sebastian Vettel.