Un circuito que no es especialmente de motor, Hungaroring puede venir bien a las aspiraciones de Red Bull. Un trazado, del que muchos dicen de su semejanza al de Mónaco, pero con una gran diferencia, que los muros no están tan cerca.
Red Bull llega al Gran Premio de Hungría tras haber conseguido un cuarto puesto con Max Verstappen y que el coche de Daniel Ricciardo tuviera que retirarse por un fallo del motor, una unidad de potencia que había sido cambiado y ha aumentado más la tensión con Renault.
El equipo del Milton Keynes ya llegó mosqueado a Alemania porque los franceses tan solo dejaron montar la versión tres de su motor en el coche del australiano, aprovechando que ya sabían que iban a penalizar, pero no fue así. Ricciardo montó MGU-K el viernes, iba a cambiar componentes el sábado (turbo, MGU-H e ICE) para evitar más sanciones de cara a Hungría y a otros GP, pero Renault no quiso. Como es evidente, cada parte defendió sus intereses.
Daniel Ricciardo, recuperar la sonrisa
En medio de su renovación o de su salida del equipo, sigue sufriendo para llevar el coche a la línea de meta. Con dos victorias esta temporada 2018, Ricciardo ha sufrido dos abandonos en las últimas tres carreras (Austria y Alemania) por culpa del motor Renault. En Silverstone también sufrió lo suyo y tan solo pudo ser quinto.
El australiano quiere recuperar la sonrisa lo antes posible, no se sube al podio desde el Gran Premio de Mónaco, fue al escalón más alto, ya que en Canadá y Francia fue cuarto. Pero la otra vez que consiguió llegar al podio también fue con su victoria en China.
Aun así, llega a uno de sus grandes escenarios, una victoria y dos terceros puestos, Ricciardo ha dicho para la web de su equipo: “Me gusta el GP húngaro. Todos dicen que es Mónaco sin paredes, pero no lo es, ¡es Hungría! Es rápido, normalmente hace mucho calor y, aunque es una pista difícil, todavía hay muchos adelantamientos y siempre está sucediendo algo”.
“El sector medio es uno de los mejores de todo el año. Es bastante rápido, con cambios realmente rápidos en la dirección. La pista solía ser bastante accidentada, pero ha mejorado mucho recientemente.
Max Verstappen, seguir con la buena racha
El holandés, desde que no está tan arropado por su familia y por amigos tras un acuerdo que llegó con el equipo, ha mostrado su mejor versión. Todo cambió con el tercer puesto en España y en los grandes premios de Canadá, Francia y Austria que hizo tercero, segundo y primero respectivamente.
Como en la temporada pasada, Verstappen no está sufriendo graves problemas de motor, al contrario que su compañero, pero en la recta final del campeonato se cambiaron las tornas, por el bien del espectáculo, ojalá el bueno de Max no tenga muchas sanciones en la que resta de temporada.
Verstappen dijo lo siguiente sobre el circuito húngaro: “Es muy difícil de dominar. Comienza con un frenado muy fuerte en la curva 1 antes de una curva descendente de la curva 2, que intenta empujarlo desde adentro. Es importante ser preciso para estar en la línea correcta para la próxima curva. La curva 4 es casi ciega, por lo que debes ser precavido durante todo el fin de semana”.
El holandés opinó lo siguiente sobre el segundo sector, que también mencionó se compañero: “El Sector 2 es bastante estrecho y tortuoso, por lo que debe tener especial cuidado allí. Curva 11, es probablemente mi rincón favorito en la pista, cuando lo haces bien es una sensación agradable. Una buena salida en la última curva es importante ya que la recta es larga, por lo que la velocidad de acarreo es vital”.
Red Bull espera volver al podio, no lo hace desde Austria cuando ganó Verstappen. Es un circuito que no depende tanto del motor, en el que Mercedes suele sufrir y mucho, algunos puestos podrían avanzar a lo largo del fin de semana.