Red Bull introducirá una nueva especificación de su combustible, Exxon Mobil, para el Gran Premio de Hungría, que es diferente al que usan los demás equipos que tienen motor Renault, McLaren y el equipo de fábrica, que utilizan BP Castrol.
El equipo llevaba un tiempo esperando con impaciencia esta evolución de combustible y, por ello, Christian Horner, director del equipo, dijo en declaraciones a Motorsport que esta será la primera evolución de carburante de la temporada. "Los muchachos de Exxon han trabajado arduamente para desarrollar los combustibles. Obviamente, el combustible juega un papel muy importante en la Fórmula 1 estos días, así que es fantástico presentar otra novedad aquí este fin de semana", explicó Horner.
También quiso añadir que en Viry-Chatillon, lugar dónde se encuentra la fábrica del equipo Renault, centran el desarrollo en su propio proveedor de combustible. "Tenemos la suerte de estar trabajando con un socio con las capacidades de Exxon", confesó. Además, opina que todo es diferente, y que depende de si eres un equipo cliente o un equipo oficial. Con esto, Horner espera que con la oportunidad que han tenido de introducir un nuevo combustible en Hungría, puedan ganar un rendimiento adicional. "Ya veremos. Hasta ahora, la respuesta ha sido alentadora", concluyó cuando fue preguntado sobre si esto valía la pena.
Con esta nueva especificación esperan reducir distancias con Ferrari y Mercedes, y así ha sido en los dos primeros entrenamientos libres, ya que en la primera sesión fue Ricciardo el que lideró la tabla de tiempos, mientras que en la segunda sesión lo hizo Vettel, pero los dos pilotos de Red Bull quedaron detrás del alemán, a escasas milésimas. Sin embargo, en los terceros entrenamientos libres, parece que Red Bull ha dado un paso atrás y se han visto superados por los Mercedes, que no habían mostrado el ritmo esperado en la jornada del viernes.